sábado, 30 de diciembre de 2023

 


CSI Las Vegas: Peligro Sepulcral.

 

Notable cuasi-telefilm, apasionante en su desarrollo, en su forma de proyectar loa claustrofobia de la victima, en los inteligentes twist que hacen te atrape en sus redes. En mi afán completista sobre Quentin Tarantino tenía pendiente este episodio (doble, 24+25) especial de la serie de la CBS, con el que concluía la quinta temporada, realizado por el cineasta de Knoxville justo después de terminar su díptico “Kill Bill”, a la que hace aquí varias notorias referencias, desde clasificar cada capítulo como Volumen (I &II), como el mencionado film protagonizado por Uma Thurman. Pero que hay muchas más marcas tarantinianas, la más evidente es que el centro de la trama es una persona viva atrapada en un ataúd bajo tierra, como el mítico tramo de la Novia encerrada en un cajón de madera en un cementerio, que intentará salir bajo los acordes de la legendaria música de Ennio Morricone ‘L’arena’. Este episodio  se convirtió en uno de los capítulos más vistos de toda la serie (hablamos de una serie que lleva en antena más de 250 capítulos), con un rating de 8.5, situándose en los dos primeros puestos en la lista de favoritos de los usuarios de IMDB con amplia diferencia. Varias de sus espectaculares escenas serían utilizadas para la cortinilla de la sexta temporada y la trama (que debería haber quedado cerrada) vería su alcance extendido hasta la mitad de la siguiente temporada, con varios cambios sustanciales respecto a lo que Tarantino había propuesto. Fue por lo tanto uno de los episodios más importantes e influyentes de la serie.

 

El guion ingenioso basado en una historia de QT mezcla elementos del pasado de personajes en una trama que discurre de modo apasionante a contrarreloj para la salvar la vida de un compañero del CSI. Y ello incorporando (como ya he mencionado) marcas genuinas del creador de “Pulp Fiction”, que es por lo que realmente me he acercado a verlo. Desde los diálogos banales chistosos, los juegos de tiempo atrás y hacia adelante y viceversa, el mordaz humor negro que aquí Tarantino consigue meter como un prestidigitador haciendo una escena de autopsia delirante en b/n (esto ya lo utilizó QT en “Kill Bill”, ello el uso del b/n para sortear a la censura), secuencia esta metida entre uno de los momentos más tensos del metraje, demostrando el director un manejo de los tiempos magistral. Hay un intercambio entre Walter Gordon y Grissom que parafrasean una línea de “KB”, Gordon: Me estás diciendo que hay un millón de dólares ahí? Junto con algunas pequeñas y lindas trampas explosivas? Qué es, un trazador, un paquete de tinte? Grissom: Normalmente estarías 100 por ciento en lo cierto, pero esta vez estás 100 por ciento equivocado; QT incorpora a Grissom su afición por el ‘Rey de los Cowboys”, Roy Rogers (popular actor de westerns y cantante country), en realidad lo es el propio QT; Está el gusto del realizador de “Reservoir Dogs” por la música pop metida en momentos cruentos (quien no recuerda la tortura de Michael Madsen cortando una oreja con la música de fondo), aquí con el tema Outside Chance de The Turtles que sale del pen drive antes de ver la conexión con la cámara que enfoca a Stokes en su ataúd.

 

Todo ello QT lo hace en armoniosa miscelánea con su visión del cine inmerso en el universo CSI, incrustando características de otros capítulos en este, que hacen sentir QT conoce la serie, ejemplo es cuando vemos a Grissom leer los labios en una muy lírica escena en que no oímos lo que dice el ‘buried’ pero si lo que le responde (“no, nunca lo hiciste Nick”), al otro lado del monitor Grissom (otro recurso QT jugando con lo críptico, que se lo digan al maletín de “Pulp Fiction), el fan de la serie lo sabe desde el episodio Sonidos del silencio (1.20, Sounds of Silence, 2001) de la primera temporada. También está presente la afición a la entomología de Grissom crucial para el desenlace del capítulo. Asimismo, que toda la trama criminal esté pergeñada desde personajes traídos de otro capítulo. Y todo evolucionado con ritmo trepidante, con agilidad, con

 

El episodio comienza con Nick Stokes conduciendo por una carretera de noche, escuchando "Lucky Too" de Bob Neuwirth en la radio. Estaciona su camioneta y camina hacia la escena del crimen. Un policía bastante mareado lo espera y le informa la situación; se encontró unos intestinos que parecen ser humanos. El policía le pide a Nick si lo puede dejar solo unos momentos, ya que se encuentra bastante mal y quiere vomitar, Stokes accede sin ningún problema. En la escena, Nick encuentra un vaso plástico de café dentro de una bolsa de evidencia ya etiquetada, momento en que es atacado por la espalda dejándolo inconsciente. 25 minutos antes se muestra las situaciones de los diferentes CSI's, Grissom y Sara reviven un caso pasado de homicidio, Sanders y Hodges juegan a un juego de mesa de los "The Dukes of Hazzard" y Warrick, con Stokes, conversan en los casilleros del laboratorio, luego deciden el azar de una moneda al aire determinar quien toma el caso de los "intestinos", resultando "ganador" Stokes. De vuelta al presente, numerosos perros policías intentan oler algún rastro dejado por Stokes.

 

El doble capítulo está regado de momentos tensos, de escenas potentes dramáticamente, y todo ello fluido. Mención especial a todo lo referente al ‘sarcófago de cristal’ en que está metido Stokes, como nos hacen sentir QT la intensidad de sus asfixia física y mental, gracias en gran parte a la labor de fotografía de Michael Slovis (“Breaking Bad” o “New Amsterdam”), con esos toques de la luz que lo atosiga, esa cámara sobre su rostro, esas miradas al otro lado de la pantalla que expresan el pavor contenido de sus amigos, que nos hace sentir una muerte en directo de forma irremediable, tan cerca y tan lejos, agobiante y angustioso. Todo ello atomizado por la gran actuación de George Eads, un notable esfuerzo expresivo que va increscendo de modo formidable nos hace pasar por varias fases.

 

El capítulo va regando de pistas y giros la trama que nos la hace cautivadora, con ese vaso metido en una bolsa de pruebas policiales; Está el fenomenal y cortante encuentro en un almacén contenedor entre Grissom y el secuestrador, manejado con gran pericia para acojonarnos, y con una resolución, que es la del Vol. I espectacular. Haciendo duales las tramas de cada episodio, la primera parte para dar con el raptador, y la segunda será para hallar a Stokes; Esa muestra de rabia en modo patada a un cubo que acaba dando con un foso, lo que deriva en una desesperada excavación entrelazada a una labor de edición que se entrelaza con Stokes esperanzado en su caja cantando “Lucky Too” (esto entronca con la canción al inicio del capítulo que es escuchaba Nick), que yo llamo ‘truco “El Silencio de los Corderos” (**spoiler); Hay una lírica secuencia donde en los estertores de las esperanzas Stokes decide grabar su testamento vital en la grabador a que le han metido con él, Grissom observa al otro lado, sin oír lo que dice, pero leyendo sus labios, estremecedor; Entramos en el desgarrador tramo en que a Stokes le entran en la caja hormigas (por el agujero que él mismo provocó con su disparo) y comienzan a morderle, es tremebundo; Las hormigas (Solenopsis invicta, "hormigas de fuego") son una maldición para Stokes pero a la vez hacen aflorar la afición entomológica de Grissom que puede dar con la clave del lugar del entierro; todo para desembocar en un rush final electrizante, y muy satisfactorio, siempre con el filtro de lo que es la serie, de la que no soy aficionado.

 

Entre las actuaciones, aparte del ya mencionado Eads, destaca, como no, William Petersen como Grissom, derrochando carisma e intensidad que me recuerdan a la Edward James olmos en “Miami Vice”, lo ves y te sientes arropado por la brújula del bien, se nota mimetizado con el rol; También muy bueno Gary Dourdan como el agente Warrick Brown, inunda la pantalla con su carácter penetrante, incisivo, exhibe con gran notoria interpretación la amistad y por tanto temor por Nick.

 

Spoiler:

 

Escena destacable es en la que Catherine (buena Marg Helgenberger) le pregunta a su padre, el millonario Sam Braun (notable Scott Wilson, últimamente reconocido por aparecer en las primeras temporadas de “The Walking Dead”), si puede darle el millón del rescate. Tras dudar, Braun le da el millón de dólares a Cath. Por cierto, Sam estaba con una joven, acompañado a demás por dos reconocidos actores, como Tony Curtis y Frank Gorshin (¿?);

 

*Cuando Grissom va a entregar el dinero al secuestrador al "4672 Carney Lane, Boulder Highway". Entra por una puerta y se encuentra con el secuestrador al otro lado a medio oscuras. Grissom le entrega el dinero, éste se burla de Gil, recordándole que la policía no negocia con terroristas. Grissom lo presiona para que le diga donde se encuentra Stokes, el tipo le responde diciendo:

"Que significa Nick Stokes para ti?

Cómo te sientes cuando lo ves en aquel ataúd?

Muere su alma cada vez que tu apretas aquel botón?

Cómo te sientes, sabiendo que no hay nada que puedas hacer para sacarlo de aquel infierno?

Desvalido? Inútil? Impotente?

Bueno. Bienvenido a mi mundo."

En ese momento, el tipo abre su chaqueta revelando un cinturón con semtex y un detonador. Grissom retrocede rápidamente, mientras el secuestrador presiona el switch, creando una inmensa explosión en el lugar. El episodio termina con Grissom en el suelo, mucha sangre en el piso y el dinero de Sam Braun volando por los aires. (Fin del Vol. I)

 

Cuando el ataúd de Nick se ha llenado de hormigas y está a punto de quedarse sin aire, en mitad del momento más dramático del episodio, QT se da el lujo de introducir ensoñación rodada en tonos grises y con humor lóbrego. Nick Stokes se ve a sí mismo en la mesa de autopsias mientras el Doctor Robbins (Robert David Hall), su ayudante David (David Berman) y su padre (Andrew Prine) hablan de él mientras lo abren y le extraen los órganos del cuerpo. El forense: “Su hijo tenía un gran corazón”, Nick mientras le arranca el corazón y se lo entrega, sensacional;

 

Por el truco de “El Silencio de los Corderos” (**spoiler) me refería a que cuando están desenterrando el primer ataúd (con el perro), hay cortes de edición y vemos a Nick nervioso por los ruidos que oye del exterior, haciendo creer al espectador es todo en el mismo escenario y salvaran al enterrado, pero cuando llegan al cajón es el perro, y vemos a Nick que los ruidos son porque el sarcófago se está resquebrajando (por su disparo). En “The silence of the lambs” hay hacia el final una edición similar tramposa cuando el FBI cree haber dado con el hogar de ‘Búfalo Bill’, cuando en realidad no es así.

 

Como a este tipo de hormigas el suelo natural les es insatisfecho (en Nevada), solo pueden estar presentes en cautiverios. Utiliza esta información, el radio del trayecto en que pudo transitar la “Ford Expedition” y la señal de la webcam, estrechan la búsqueda a solo 2 cautiverios. Sara recuerda el comentario le hizo Kelly sobre su trabajo en jardinería, encontrando así el cautiverio donde se encuentra Nick, partiendo rápidamente en su búsqueda. Ya en el sitio, docenas de oficiales van en búsqueda de tierra recientemente removida, ya que en ese sector se encontraría Nick. Catherine, con un scanner electrónico, logra captar la proveniencia de la señal de la webcam. Nick en el interior aún sigue siendo atacado por las hormigas. En blanco y negro se muestra un corte de escena del momento de la supuesta autopsia de Nick, con el doctor Robbins y a Dave Phillips que, felices por el deceso de Nick, le dan la causa de muerte a Judge Stokes (el padre de Nick). Nick, consciente que está alucinando, y debido a las mordeduras de hormigas, mira desapasionadamente como abren su cuerpo y como juegan con sus órganos en la autopsia. En la realidad y ya desesperado, lleva la pistola hacia su barbilla con el dedo a punto de apretar el gatillo, momento en que Warrick quita los últimos rastros de tierra sobre el ataúd, Nick deja caer el arma. El equipo abre una esquina del ataúd y gracias a un extintor, matan a las hormigas que acosaban a Stokes con cortas explosiones de dióxido de carbono. Sin embargo, antes de retirar a Stokes del ataúd, Catherine recibe un llamado de Hodges, le informa que encontró rastros de semtex debajo de la caja (donde se encontraba el perro), conectados a un interruptor de presión. Catherine les advierte a todos que no deben sacar a Nick, y les informa la nueva situación. Nick ve cómo Brown se aleja de su lado y comienza a desesperarse, Grissom se acerca al ataúd y le intenta explicar lo que sucede. Nick no entiende y empieza a gritar, entonces Grissom coloca su mano encima de la caja y lo llama por "Poncho", manera en que sus padres se dirigen a Nick. Ya calmado y Nick enterado de lo que ocurre, abren la caja, atan una cuerda al cinturón de Nick y Grissom pide un tractor cercano con 200 libras de tierra, para igualar la presión que necesitan las bombas de sentex. Con el equipo en una fila, Grissom da la orden de tirar de Nick y al mismo tiempo de verter la tierra. Consiguiéndolo no lo bastante rápido para prevenir la explosión, pero lo suficiente para salvar a Nick. Grissom, Sara, Brass, Greg y Ecklie ven como una ambulancia se lleva al herido Stokes, junto con su amigo Warrick y Catherine a su lado. Grissom le dice a Ecklie que quiere a su equipo de vuelta. Días más tarde, Nick va a visitar a Kelly a la cárcel de Nevada. Ella desinteresa de lo que él puede decirle se marcha, pero Nick logra hacer que lo escuche. Le pide "no tomarlo con ella" cuando deje la cárcel. Kelly se marcha, pero más tarde se sienta en su celda y reflexiona las palabras de Stokes.

 

Crate 'n Burial" es un episodio de la temporada 1 de CSI que tiene muchas similitudes en términos de trama con "Grave Danger". Por ejemplo, el secuestrador entierra a su víctima, la esposa de un hombre de negocios, bajo tierra en el desierto de Nevada y exige 2 millones de dólares para su regreso sano y salvo, en un plazo breve de 3 horas. Sin embargo, el culpable de "Crate 'n Burial" busca dinero, no venganza, y la víctima (Laura Garas) fue inicialmente cómplice de un secuestro simulado. Este episodio concluye la disolución del equipo, ordenada por el supervisor Conrad Ecklie. Ecklie inició la disolución como represalia contra Grissom por supuestamente manejar mal un caso anterior en el episodio "Mea Culpa". Ecklie asignó a Nick y Warrick a Catherine y a Greg y Sara a Grissom. Tras colocar a Nick en una ambulancia, Grissom ene l final de este capítulo le dice desafiante a Ecklie: "Quiero que regresen mis muchachos!", a lo que Ecklie acepta de mala gana.

 

El episodio cuenta con la actuación de dos veteranos actores: Tony Curtis y Frank Gorshin (interpretó a Enigma en la serie de Batman de 1966 protagonizada por Adam West y en la película derivada, hacen el papel de ellos mismos, como amigos de toda la vida del millonario Sam Braun. Frank Gorshin murió solo dos días antes de que el episodio fuera emitido, por lo que el episodio fue dedicado en su memoria.

 

Me queda un muy notable cuasi-telefilm con marcas tarantinianas muy agradecibles. Gloria Ucrania!!!

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