martes, 27 de enero de 2015


AMERICAN SNIPER.

Mis expectativas eran enormes en este film, la dirección de Clint Eastwood sobre una historia que tiene tanto jugo como es la biografía de un héroe americano, con los precedentes de “Banderas de nuestros padres” y “Cartas desde Iwo Jima”, deconstruyendo mordazmente el espíritu del “héroe” y su tratamiento por la sociedad, y al final la montaña que pensaba sería esta cinta se me ha quedado en un bonito ratón, sin más, un film plano, sin apenas hondura dramática cayendo peligrosamente en algunos tramos en el edulcorado panfleto propagandista propio de los anuncios de la Armada USA para que se alisten en sus filas, cinta que raya la almibarada hagiografía, no es que sea floja es que el nombre de Clint pesa mucho. Al final se queda en un relato desequilibrado, en el que se cruzan irregularmente dos subtramas, la bélica con escenas muy bien filmadas, de gran ritmo, sintiendo la tensión, los disparos, las explosiones, el peligro, esto se entrelaza con su conflicto familiar en el que debe sobrellevar los fantasmas de la guerra, esta parte me resulta floja y manida, aporta nada al género. Destacar eso sí, la gran interpretación de Bradley Cooper.





Arranca en medio del conflicto de Irak, allí vemos a Chris Kyle (gran Bradley Cooper), un francotirador de los Seal, desde una azotea vigila amenazas ante una incursión del ejército americano en la zona, ve a una mujer con un niño que sale a la calle, allí ella le pasa una granada a él, entonces hay un flash-back en que vemos la infancia de Chris (correcto Cole Konis) con su severo y estricto padre, caza en Texas, su padre alecciona a Chris y a su hermano Jeff (inane Lukas Sun) sobre cómo ser metafóricamente perros pastores que defiendan a la manda de los lobos. Entonces hay un salto temporal y vemos a los dos hermanos en competiciones de rodeo, hasta que un día en 1998 ven en la tele el ataque terrorista a la embajada estadounidense en Nairobi, esto impulsa a los hermanos a enrolarse en el ejército, Chris debido a sus condiciones físicas y fortaleza mental se apunta en los Seals. En los Seals Chris se labra un tremendo curriculum como francotirador, obteniendo el apelativo de “Leyenda”. En un bar conoce a la que será la mujer de su vida, Taya (buena Sienna Miller), con la que se casa. Tras los atentados del 11-S Chris es enviado a Irak, donde continúa agrandando su Leyenda. Allí encuentra su antagonista en otro francotirador,  Mustafa (inane Sammy Sheik), un yihadista sirio que estuvo en las olimpiadas. Pero los problemas mentales de tanta presión ante los horrores de la guerra le hacen mella, teniendo muchos problemas con su esposa e hijos.


El guión de Jason Hall (“El poder del dinero”) se basa en la biografía oficial de Chris Kyle “American Sniper: La autobiografía del más letal francotirador en la historia militar” (2012) de Scott McEwen y Jim DeFelice con la ayuda del propio francotirador, se estima que fueron 255 los enemigos que mató, aunque oficiales por el Departamento de defensa son 160, los que tuvieron un testigo, con lo que se convirtió en un Mito para el ejército USA y por ende para la nación. En 2012 la Warner Bros compró los derechos del libro junto a Bradley Cooper que protagonizaría y produciría el film, se barajó para la dirección el nombre de David O. Russell, que ya hizo el apreciable film bélico también con fondo iraki “Tres Reyes”, asimismo ya había trabajado 2 veces con Cooper, al final el proyecto cayó en manos de Spielberg, pero tras trabajar en el guión decidió dejarlo pues su visión del film requería más presupuesto del que tendría, al final sería Clint Eastwood que a sus 84 años sigue al pie del cañón, este año además ha estrenado otro film, “Jersey boys”.

Es un relato muy fácil de hacer para Eastwood, sin tomar riesgos, sin afrontar desafíos, todo muy ligero, previsible, transitando por lugares comunes en el género de ensalzar el patriotismo americano, que lo veo muy loable, pero deberían de ofrecernos un producto inteligente y sutil y no dárnoslo todo masticado, tomando al espectador por un mente simple, e igual es que en USA lo es, pues ha sido el film más taquillero de Clint. Y ojo, una de las cosas buenas que si tiene la cinta es que no se posiciona políticamente, no aborda si el conflicto está justificado, simplemente es el sentido del deber de unos soldados, ni tan siquiera me dejo llevar por la corriente de anti-Guerra de Irak (no tengo una opinión cerrada sobre los motivos), como los que han puesto el título en español, “El Francotirador”, obviando lo de American, quizás temiendo que podría predisponer al público hispano en contra, para mí eso es creer muy poco en la inteligencia del espectador, y como bien he leído es un producto cien por cien bandera Barras y Estrellas, Dios, Patria y Familia, aquí los 3 elementos se cuestionan, por no hablar de la Guerra de Irak, o poniendo a un protagonista que era una leyenda por matar a más de 250 personas, un tipo que llamaba a sus enemigos “salvajes”, aquí la izquierda la machacará.

Es un relato donde la profundidad es trivial, los conflictos morales del protagonista resultan deja vú, transita por convencionalismos políticamente correctos, una narración que discurre a base de set-pieces, en un bucle infinito de combates vuelta a casa consternado, conversaciones chatas con sus camaradas de armas y vuelta a la contienda, no hay sensación de avance. El mensaje que Clint desea transmitir que las Guerras cambian a las personas, que las batallas traumatizan me queda liviano y sin emotividad, lo de que el belicismo deja no  solo muertos y heridos físicos si no también psíquicos está ya muy trillado, no hay óptica nueva, no opta por buscar vías nuevas y esto repercute en su plúmbeo calado emocional. Tanta poca chicha detectan los guionistas que deben inventarse a su némesis en el bando insurgente, a semejanza de la cinta de Annaud “Enemigo a las puertas”, pero se olvidan de darle alma, un tipo al que vemos actuar fríamente pero al que no oímos hablar, una simple sombra que se mueve por azoteas, ello hace que nos sea naif su duelo. Y es que otra de las taras es que se guiñoliza a los insurgentes, son simples caricaturas sin rasgos mínimamente humanos, son meras líneas de contornos rellenadas de carne, esto hace que cuando Chris los apunta con su arma y los vemos en subjetivo la sensación sea la de estar ante un videojuego matando figuras, quizás como el propio Kyle los veía y de esta forma distanciarse de lo que hacía,  esto podrá gustar a los que busquen algo hueco y un pasarratos escapista, yo espero algo más, sobre todo de Clint. Pero es que tampoco se da solidez a los secundarios, sus compañeros son meros esbozos, nada te importa que les pase, complementos-florero, el colmo es el manido tramo en que escuchamos a uno hablar de su pedida de matrimonio justo antes de entrar en combate, menuda cosa rancia previsible que sabemos le pasará.

Eastwood radiografía el heroísmo de un modo plano, quiere transmitir la odisea vital del protagonista, comienza con entusiasmo y poco a poco deriva en obsesión enfermiza por proteger a los suyos, esto le queda atropellado, intenta humanizar a una máquina de matar, un gran stajonovista profesional en su sentido del deber, como le aleccionó el padre, un perro pastor que debía proteger a su manada, en este caso con su rifle, recuerda bastante a “En tierra hostil” de Bigelow, en lo de un tipo que solo se siente vivo en la guerra, Chris cuando volvía con su familia solo piensa en los compañeros que está dejando de salvar por estar en su hogar. Entiendo es un relato que debe contarse, el de este soldado, pero merece un tratamiento más punzante y no que al final se te quede la impresión de estar ante un producto pro-alístate en el ejército, vivirás grandes aventuras y si te esfuerzas podrás ser considerado una Leyenda. Es producto que pretende resaltar el espíritu masculino de la lealtad y la camaradería, anhelando emitir grietas en el héroe. Hay un tremendo desequilibrio cuando Chris vuelve con su esposa, me queda algo rebuscado, con momentos que rozan lo cursi, impropios de Eastwood, son tramos azucarados y maniqueos que llegan a estorbar.

Ni mucho menos es un film malo, posee una dirección pétrea, no cae en las pomposas escenas de entrega de medallas, tiene un sentido del ritmo que hace nunca caiga en el tedio, teniendo su punto fuerte en la filmación de los combates, con un gran sentido realista, alternando ingeniosamente con diferentes puntos de vista, con sugestivas tomas aéreas, así como de grúa dando una gran amplitud de campo al espectador, con escenas muy tensas de acción, con un diseño de producción de James J. Murakami (Apocalyse Now” o “Sim perdón”) y Charisse Cardenas (“Los sustitutos” o “Casi famosos”) y sobre todo en lo que se refiere a Irak portentoso, rodada esto en Rabat (Marruecos), con una fotografía de Tom Stern  (“Mystic River” o “Million Dollar Baby”), patinando los fotogramas en Irak de un tono arenoso que casi camufla a los soldados, excepcional en la batalla en medio de la tormenta de arena, y con el electrizante montaje de Joel Cox (“Banderas de nuestros padres” o “Sin perdón”) y Gary D. Roach (“Mystic River” o “Million Dollar Baby”), hacen todo esto las escenas de guerra de gran tensión.

Verdadero Chris Kyle
Bradley Cooper encarna con brío y veracidad a Chris, lo matiza y le da cierta tridimensionalidad, para dar más autenticidad gano 40 libras de peso muscular, el resultado es un tremendo mimetismo con el personaje, añade intensidad, carácter, dejando traslucir tras su fachada de gigante fragilidad psicológica, angustia vital, impregnando de humanidad a una bestia de matar, incómodo cuando le llaman “Leyenda”, destilando humildad y una personalidad protectora atronadora, tipo lacónico, hierático, estoico, una labor que dotada de una gran naturalidad. Siena Miller entrega una actuación convincente sin dejar mucha huella ante la gran sombra de Cooper.




Momentos para el recuerdo: La presentación de Chris en la azotea apuntando con su arma, con el dilema que se le presenta entre sí matar a un niño o no; El discurso que el padre de Chris les hace a sus dos hijos sobre las 3 clases de personas que hay; La tremenda escena de combate en que los Seal llevan un dinero para obtener información de un irakí, (correcto Navid Negahban), para coger a unos cruentos terroristas de Al Qaeda, Abu Musab al-Zarqawi y su lugarteniente ”El Carnicero” (Mido Hamada),  el tramo deriva en un adrenalítico entente bélico, en el que aparece la némesis de Chris un despiadado francotirador de Al Qaeda, acabando en una emboscada escalofriante de realismo, donde un taladro tendrá mucha importancia; Las estremecedoras conversaciones telefónicas entre Taya y Chris mientras este está en impasse de combate, siendo el clímax de esto una conversación interrumpida por un tiroteo en que el móvil de Chris cae al suelo y Taya queda horrorizada, poniendo de relieve lo turbador de la Guerra moderna, que se lo digan a los pilotos de drones USA que combaten por todo el planeta  y son manejados desde Nevada; El encuentro que tiene en un permiso con un veterano de guerra que él salvo de la muerte, este le alaba y le enseña su pierna artificial, Chris rehúye incómodamente la situación; Cuando estando de permiso con su esposa esta lo nota tan retraído que le dice <Incluso cuando estás aquí, estás no aquí>; El inquietante momento en que Chris en su casa juega cual vaquero con una pistola de juguete apuntando a su esposa, juntándose perturbadoramente, un divertimento con cómo se toma Chris las armas; El último combate,. Primero con el intenso duelo entre francotiradores y posteriormente acaba en batalla en medio de tormenta de arena, magistralmente rodado, un alarde de sapiencia y de transmitir desazón y tensión, con la llamada de un Chris a su esposa previendo su muerte, espléndida, con una fotografía espectacular, de las que se te quedaran grabadas; Cuando un terapeuta le pregunta si tiene remordimientos por lo que ha hecho en combate, Chris responde <Estoy dispuesto a encontrarme con mi creador y responder por cada tiro que hice>, premonitorio.

Escenas bastante simplonas: El adiestramiento de Chris en los Seal, más sobado que las tetas de una actriz porno, totalmente prescindibles; Cuando se conocen Taya y Chris, con una situación y diálogos ajados, se suma la incoherencia de que si a ella no le gustan los soldados, que hace en un bar para ellos?; Igual en USA queda muy bien pero lo de que se alista en la Armada por qué <Este es el mejor país del mundo>, queda bastante sobado y fuera de lugar, le resta humanidad a Chris; La ridícula escena en que Chris está con su esposa e hijo, él lo coge en brazos y canta a distancia es un muñeco, patético, encima le ponen llorando y sin moverse, surrealista y patética escena, con el dramatismo anulado por este artificioso y penoso elemento; Se altera el principio, pues en el libro está ante el objetivo de Chris una mujer con una granada, el guión añade que la mujer lleva a su pequeño hijo al que le pasa el artefacto, esto para provocar el dramatismo, pero cae en una incongruencia, para que debe la mujer salir en medio de la calle a darle el explosivo? Porque no se lo ha dado en su casa y no lo ha expuesto a la vista de sus enemigos?

Spoiler:

Bradley Cooper y Chris Kyle

Christopher Scott, "Chris" Kyle
 nació en Odessa (Texas) el 8 de abril de 1974 en el seno de una familia muy religiosa que llevaban una granja. A los 8 años le sucedió algo que le cambiaría la vida, le regalaron un rifle Springfield, salía con el arma con su padre a cazar faisanescodorníces y ciervos, perfeccionando un don especial para la puntería, con los años comenzó a dedicarse a cowboy en rodeos, un accidente derivó en una lesión de brazo que le hizo abandonar. En 1998 intentó alistarse en la armada USA, pero su problema en el brazo le hizo ser rechazado, entró en una segunda oportunidad, entrando en 1999 en los Seal como francotirador. En el contexto de la Guerra de Irak estuvo 4 veces allí, operando en Ramadi, Anwar y Bagdad. En Irak se estima mató a 255 enemigos, aunque 160 fueron oficiales por el Pentágono, record para el ejército USA. Llegó a acertar en objetivos a 2100 metros de distancia, en la segunda batalla de Fallujah  mató en un solo día a 40 insurgentes irakís, otra vez mató a una mujer con un bebé en brazos que llevaba una granada, esta se dirigía a un grupo de soldados USA, ganándose el apelativo por los insurgentes como el Satán de Ramadi, poniendo estos precio a su cabeza, 20000 $. Sus compañeros le apodaron “Leyenda”, el General de Infantería y de la Marina se lo puso. Fue herido 2 veces por francotiradores insurgentes, sobre4viviendo a 6 atentados con explosivos, ganó dos Estrellas de Plata y cinco Estrellas de Bronce , 1 de la Armada y la Infantería de Marina Medalla de Encomio , y 2 de la Armada y la Infantería de Marina Medallas del Logro. Permaneció en los Seal 10 años, hasta 2009, dejando la Armada para intentar estar con su esposa y dos hijos.  Tras dejar el ejército su convicción moral en que lo que hizo estuvo bien no se resquebrajó, pensaba que la muerte de un enemigo (a los que no consideraba personas) salvaba vidas de los suyos, en una entrevista dijo <La primera vez, ni siquiera estás seguro de que puedas hacerlo (matar). Pero yo no estaba allí mirando a esas personas como personas. No me preguntaba si tenían familia. Solo estaba tratando de mantener a mi gente a salvo>. Creo una empresa de seguridad, Craft International. Escribió junto a Scott McEwen y Jim DeFelice su autobiografía, contando sus experiencias en guerra, publicándose en 2012, siendo éxito de ventas. El 2 de febrero de 2013, Chris y su amigo Chad Littlefield fueron a un campo de tiro en Rough Creek Lodge en Glen Rose (Texas) a hacer prácticas, sobre las 15:00 fueron baleados mortalmente a larga distancia con un arma automática, a las 21:00 horas de ese mismo día fue arrestado en Lancaster (Texas) Eddie Routh como autor del asesinato, los motivos no son claros, Routh fue marine destinado en Irak cuando allí estaba Kyle, se le achaca a problemas mentales, aún está en espera de juicio. Chris colaboró en el guión del film pero mientras se preparaba el proyecto fue asesinado, esto hizo que su esposa Taya se involucrará con pasión. Asimismo en el film se dice cuando se alista en los Seal que es demasiado viejo con 30 años, esto es falso, pues se enroló con 25.

Eddie Routh, asesino de Chris Kyle


En conjunto queda un interesante producto, pero insatisfactorio midiendo quien la dirige, aún así agradezco Clint a sus 84 años siga queriendo aportar a sus fans, siempre deja pinceladas de calidad. Fuerza y honor!!!

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