GUARDIANES DE LA GALAXIA.
Con motivo del reciente
estreno de la tercera parte de esta franquicia, avalada con muy buenas
críticas, me he sentido ‘obligado’ a comprobar si los comentarios sobre ella
eran acordes A mi singular (todos lo son) gusto cinéfilo, y me he sentido
frustrado a la par que decepcionado, no la había visto aún, casi diez años
después de su estreno, y es que hace mucho que me desconecte de los sub
productos de superhéroes, me resultan infantiles o pomposos, cuando en realidad
son akelarres de efectos visuales desnaturalizadores CGI, con personajes cartón
piedra, todos cortados por el mismo patrón, con argumentos más simples que el
mecanismo de un martillo. Solo puntualmente me he acercado a films de este
tipo, pero solo atraído por sus directores o por su humor corrosivo, como es el
caso de “Thor: Ragnarok” (2017), por Taika Waititi o a las series de tv “The
Boys”, por como todos son villanos en realidad, y por su humor negrísimo, o “El
Pacificador”, en cierto modo por lo mismo que la otra serie, y de esta es creador
y director James Gunn, como me gustó su humor transgresor y nada complaciente,
es otro por lo que me he visto esta “Guardianes de la Galaxia”, y mi chasco ha
sido de probablemente de no acercarme en mucho, pero mucho tiempo a ver otro
film Marvel, pues me ha resultado de una puerilidad galáctica, el eterno
enfrentamiento Bien vs Mal, que aquí se les quiere dar un patinado gamberro, al
querer colocarnos que los ‘salvadores’ de la galaxia son unos malotes, cuando
nunca les vemos hacer nada malo, todo impostado.
Basada en el equipo de
superhéroes de Marvel Comics del mismo nombre, creado a finales de los 60,
basado en una reescritura del comic original publicada en 2008. Décima película
del Marvel Cinematic Universe (MCU). Dirigida por James Gunn, escribió el guión
con Nicole Perlman (“Capitana Marvel”), cuenta con un elenco que incluye de
prota a Chris Pratt, Zoe Saldaña, Dave Bautista, Vin Diesel (para dar voz y
prestar movimientos en capture-motión al árbol humaniforme Groot) y Bradley
Cooper (otro que está para dar voz y movimientos al mapache Rockett) como los
Guardianes del título, junto con Lee Pace, Michael Rooker, Karen Gillan, Djimon
Hounsou, John C. Reilly, Glenn Close y Benicio del Toro. Por supuesto con unos
valores de producción propios de los 170 millones $ de presupuesto, con unos
efectos visuales espectaculares, con casi y todo retroproyecciones en pantallas
verdes y sexteado por los mencionados CGI.
Pero para un argumento
caótico, en su desarrollo contradictoriamente simplista, con un desarrollo
atrompicado, donde los planes y su planificación resultan risibles (siendo
benévolos), con una moralina propia de la catequesis, donde el mensaje del
compañerismo y la solidaridad entre amigos llega metido con fórceps, pues todo
este colegueo llega apresuradamente, no se establecen unos cimientos sobre los
que basar que estos guardianes arriesguen la vida por el otro ‘guardián’, todo
da la sensación de suceder por imperativo del guion, con personajes clichés,
con humor que lo más que me saca es media mueca de sonrisa, con decir que la
frase más ingeniosa es de Gamora: ‘Voy a morir rodeada de los idiotas más
grandes de la galaxia’. Todo muy chuli, sin tensión dramática alguna, por el
tono ligero nunca sientes vayan a morir los protas. Un pasatiempo huero de
contenido, sin una sola escena a recordar, nada de épica, explosiones,
disparos, peleas, todo en plan videojuego, sin que te motive, pero todo sin
garra alguna, y esto es grave, y es que toda su acción se siente manufacturada,
ya muy vista, nada original, hay ataques pantagruélicos a la población, pero no
vemos morir a nadie, todo se siente infantiloide, sin tensión dramática, pues
sabes nadie de los buenos morirá, ello por la ligereza de su desarrollo, y si
alguno cayera, tampoco es que me sentiría muy conmocionado al no establecer
asideros emocionales con estos seres cartón piedra. Un producto de consumo
rápido, viene a ser el fast food de los cinéfilos, pero teniendo en cuenta que
el McDonalds es comida gourmet, esto sería un sucedáneo de esta franquicia (no
se si me explico bien o soy como gran parte del argumento, muy farragoso). Lo
del grupo de colegas, con algunas rencillas, algún chascarrillo, pero que
sabemos estarán siempre unidos es muy manido, pero encima aquí se nota todo muy
sobado. El humor, del que tanto hace gala y presume este film, me ha resultado
poco estimulante, los villanos me han resulta, en el peor de los sentidos de
chiste, como decía Hitchcock (más o menos), un héroe requiere de un villano a
su altura para realzarlo, y aquí el antagonista es una caricatura de
motivaciones ridículas. Donde la estética no ayuda a sumar, refrito de otras
muchas pelis, parece un reciclado de otras cintas similares.
La historia en sí es que
el kree Ronan quiere un orbe que esconde en su interior algo muy importante
(MacGuffin, siguiendo con los palabros hitchcockianos). Peter Quill (Chris
Pratt) también lo quiere, pero por un encargo; y Gamora (Zoe Saldanha y sus
gustos con el Body-painting, aquí es verde y en Avatar azul ¿?), hija traicionera
de Ronan, también va tras él por otros motivos. La cuestión es que Quill y
Gamora y otros tres personajes más, Rocket (mapache humaniforme con la voz de
Bradley Cooper; James Gunn dijo que
para el papel de Rocket, algunos movimientos físicos de Cooper, incluidas las
expresiones faciales y los movimientos de las manos, se registraron como
posibles referencias para los animadores, aunque gran parte de la actuación de
Sean Gunn [hermano del director] se usa a lo largo de la película), Groot (con
la voz de Vin Diesel, hizo "El gigante de hierro", amén de
proporcionar la captura de movimiento), árbol ambulante cuya única oración en
inglés ("I am Groot"), y Drax el Destructor (el ex campeón de
lucha libre de la WWE, Dave Bautista), que no entiende las metáforas, estos
tres se unen cuando van a la prisión de Kyln los dos primeros, serán quienes
más tarde formen el grupo de los Guardianes de la galaxia se hacen amigos, y
descubren que el orbe es muy poderoso.
Se inicia de modo
engañoso, cual drama lacrimógeno, con un adolescente en un hospital en 1988, lo
vemos con un walkman y sus auriculares, allí su madre está en las últimas por
cáncer, él no quiere tocarla cuando ella quiere abrazarlo, lo sacan fuera y la
madre muere, y el iracundo quiere abrazarla. Tras ello sale del hospital y en
la puerta llega una nave espacial y es absorbido por ella. Tras ello una
elipsis y vemos al chico a hora un joven treintañero que llega eren su nave a
un planeta desierto con volcanes en ebullición. Allí entra en un templo, se
coloca los auriculares del walkman (por eso sabemos que es él chico del inicio)
y se pone a escuchar mientras bailotea el rítmico tema “Come and Get Your Love”
de Redbone, mientras avanza pega patadas a especies de bichos parecidos a
ratas, incluso coge alguno que utiliza como micro, hasta llegar a un orbe
(pieza redonda) sobre un pedestal, en claro plagio del inicio de “Indiana
Jones”. Irrumpen en el lugar unos tipos que también ansían el orbe, ya hay
escena de acción, plagada de CGI cantarina por todos lados, marcado el tono del
resto del film. Es un comienzo que genera expectativas en el humor, no en la
acción, pero quiero destacar el dribling que nos hacen con ese inicio
melodramático exacerbado en el hospital, que luego nada tiene de importancia en
la película, no sabremos porque lo han raptado, ni como ha llegado a ser como
es el prota ahora llamado Star Lord, ni lo vemos traumatizado por ello, quizás
se desarrolle en secuelas posteriores, pero esto es una estafa, pues
difícilmente veré más y esto habría que verlo como unidad, y no como una serie.
Al final parece que la conexión con los 80 solo está hay para dar cabida
vintage a los temas pop. Star Lord en realidad un personaje cruce entre Indiana
Jones (incluso tiene su momento recuperar el sombrero arriesgando la vida, en
este caso para recuperar unja cassette que se pierde en el espacio) y el Han
Solo de “Star Wars”. Luego las mencionadas expectativas no se cumplen.
Cae en un sinfín de
piezas de humor cansino sobre el físico de Rocket, la primera vez vale, pero a
de ‘357’ resulta cansino, se supone un boom su personaje, pero no le veo la
chispa que esperaba, sus gags me resultan poco estimulantes, al parecer debe
hacemos gracia que siempre coge una gran arma para disparar (¿?). Que si Groot
(omnipotente, con lo que pueden escapar por su poder cuando quieran de la
prisión, nadie puede con él, pero nadie) repitiendo ‘Soy Groot’, pretendiendo
que su frase final sea emotiva resulta estúpido. Por cierto, ambos Rocket y
Groot, repiten notoriamente la dinámica de Han Solo y Chewbacca, volvemos a
“Star Wars”.
Lo mejor del film es la
cinta de casete ‘Awesome mix’ de Peter Quill, es un placer melómano oír los
temas retro de los 70 con termas como ‘I'm Not in Love’ de 10cc, ‘Come and Get
Your Love’ de Redbone, ‘Go All the Way’ de The Raspberries, ‘Hooked on a
Feeling’ de Blue Swede, ‘The Piña Colada Song’ de Rupert Holmes, ‘Moonage
Daydream’ de David Bowie, ‘Cherry Bomb’ de The Runaways, ‘Ooh Child’ de The
Five Stairsteps, ‘Fooled Around and Fell in Love’ de Elvin Bishop, ‘Ain't No
Mountain High Enough’ de Marvin Gaye and Tammi Terrell, o ‘I Want You Back’ de Jackson
5.
Spoiler:
Ósea que cuando y tiene
el orbe Roan no lo utiliza ipso facto contra el planeta Xandar, es un malo
típico de James Bond, esperando siempre a los buenos le puedan sabotear en el
último segundo, venga ya!; Por que Ronan espera al último momento a cargarse todas
las naves que le acosan de Xandar? Es ridículo; Lo del bailecito de Peter ante
Rona para despistarlo es de lo más ingenioso que he visto en lustros o siglos,
menuda idiotez!; La muerte de Groot te la exponen de la nada muy
sentimentaloide, la veo inspirada en el final de “Toy Story 3”, pero en plan a
mi como espectador me importan poco los personajes que veo rodeados por las
ramas de Groot; Ese clímax de todos cogidos de la mano para acabar con Ronan me
ha resultado de una pobreza de ideas sangrante, todo imbuido por los f/x
digitales que me saca de cualquier emoción posible.
Ah, que leches hacen en
esta película Glenn Close, Benicio del Toro, John C. Reilly o Michael Rooker?
He hecho una encuesta de una persona en mí mismo y la respuesta con porcentaje
es que todos tenemos que pagar hipotecas; se me olvidaba, que pinta en los
puñeteros (inevitables en Marvel) créditos finales la aparición de un anatema
de fracaso comercial de los 80 como era “Howard the Duck” (1986), producción de
George Lucas desastrosa en todos los sentidos, de crítica y de taquilla.
Costó $ 170 millones y fue
un éxito comercial, recaudó 773,3 millones de dólares en todo el mundo y se
convirtió en la tercera película más taquillera de 2014. Fue nominada a dos
premios Oscar. Se han lanzado dos secuelas: Guardians of the Galaxy Vol. 2
(2017) y Guardianes de la Galaxia vol. 3 (2023).
Los Jardines de la Bahía
(arriba) en Singapur ayudaron a inspirar el aspecto del planeta Xandar.
Decepción galáctica, que
me hace no tener que gastar tiempo en sus dos secuelas, algo es algo. Gloria
Ucrania!!!
PD. Josh Brolin fue
revelado como la voz de Thanos.
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