domingo, 25 de agosto de 2024

 


EL ESPECIALISTA. (THE FALL GUY)

 

Entretenida comedia de acción dirigida por el especialista en la materia David Leitch, responsable de la exitosa franquicia John Wick (junto a Chad Stahelski), tras lo que se montó en sagas ya iniciadas por otros, como es la segunda parte de Deadpool y el spin off “Fast & Furious: Hobbs & Shaw”, tras lo que realizó la estupenda “Bullet Train”, todas ellas aunando el humor con el thriller con escenas de acción vistosas (también dirigió “Atómica”, pero esta tenía la acción brillante, pero carecía de humor). El guion es de Drew Pearce (“Iron man 3” o “Misión imposible: Nación Secreta”), basada vagamente en la serie de televisión de los años 80. En la serie original, Colt aquí encarnado por Ryan Gosling, trabajaba como cazarrecompensas y empleaba trucos cinematográficos para capturar a sus objetivos, excusa divertida artificial para las escenas de acrobacias y pirotecnia. Aquí, las habilidades de Colt se integran directamente en la acción, su experiencia en el set lo hace especialmente apto para enfrentarse a varios matones a la vez, improvisar armas con lo que haya disponible, saltar de un vehículo a toda velocidad a otro, como manejar con soltura una lancha en una persecución explosiva por la bahía de Sídney, o caer desde gran altura de un helicóptero.

 

David Leitch, ex doble de acción en la vida real, fue doble de riesgo de Brad Pitt cinco veces y dos veces de Jean-Claude Van Damme. Leitch y su equipo ganaron dos premios por El ultimátum de Bourne en premios del Sindicato de Actores de Cine. Con este proyecto, el director honra su profesión original. En 1981, la leyenda de las acrobacias Hal Needham dirigió “The Cannonball Run”, lo que significa la transición de doble a director no es nuevo. En los últimos años, pantallas azules, efectos digitales y la inteligencia artificial en rápida evolución han llevado a quienes realizan hazañas del mundo real aún más lejos para impresionar (aquí vista como un enemigo tóxico), con trabajos con cables, “oners” y otras técnicas que se muestran aquí, la trastienda de las escenas de acción. Leitch ofrece clase magistral de puede todos los tipos de acrobacias hacen este oficio algo cuasi-sobre humano, y ello reduciendo al mínimo los desnaturalizadores CGI (aunque demasiado presentes en la set-piece de acción con el camión con container, que es un tiro en el pie). Hay explosiones, aparejos, perros entrenados, tipos ardiendo, persecuciones giros y choques de autos, tiroteos, luchas con espadas, coreografías de lucha, saltos en camiones, lanchas y helicópteros, entre otras cosas. Falta algo con lo que dar regocijo al espectador ávido de escenas de acción?

 

La trama sigue a un especialista (Ryan Gosling) que trabaja en la película de acción debut como director de su exnovia (Emily Blunt), solo para verse involucrado en una conspiración que rodea al actor principal de la película Tom Ryder (Aaron Taylor-Johnson).

 

En los Premios de la Academia de este año, las estrellas de “The Fall Guy” Ryan Gosling y Emily Blunt presentaron un video homenaje a los especialistas en acrobacias que incluía clips que abarcaban desde la era del cine mudo hasta las películas de acción más recientes como “RRR” y la serie “Fast & Furious”. Fue un paso adelante para un grupo cuyas contribuciones son frecuentemente infravaloradas a pesar de, como dijo Blunt, “arriesgar la vida y la integridad física” por el cine. Y, sin embargo, el segmento no vino acompañado de un premio. Hay un chiste sobre la falta de Oscars para los especialistas en “The Fall Guy”, dirigida por David Leitch, ex especialista que hizo de doble de Brad Pitt y Jean-Claude Van Damme antes de ascender a la silla del director con “John Wick” en 2014. Como ex actor de escenas de riesgo, Leitch no es objetivo en el tema, lo que podría explicar por qué “The Fall Guy” evita un cliché familiar en películas sobre tipos con trabajos peligrosos, que sus novias no quieren verlos morir. En el 99% de las películas de Hollywood, objetivo es hacer invisible el trabajo de los especialistas. Se supone el público debe creer la estrella pone en riesgo su propia vida saltando de edificios, haciendo estallar coches o peleándose con escuadrones de malos, en “The Fall Guy”, el especialista se convierte en el héroe, con él mostrando toda la trastienda del como se crean estas peligrosas escenas (jocoso como aprovecha su ‘poder’ la directora para hacer repetir a su ex [por venganza] una escena en la que es una antorcha humana), mientras la estrella es una prima donna afirma hacer todas sus propias acrobacias, necesita su doble intervenga cuando las cosas se ponen difíciles. Con esto último criticando al elitismo hollywoodiense, que se creen por encima del bien y del mal.

 

Ello dentro del subgénero meta del cine dentro del cine (el epicentro es el rodaje en Australia del blockbuster de ciencia ficción llamado Metalstorm, mezcla de Dune más con Mad Max), y con ello el juguetón guion hace chistes constantes sobre otros films, sobre todo en la relación entre el prota y su colega de profesión Dan Tucker (Winston Duke), que cita éxitos de taquilla, pero también con referencias a “Miami Vice” o “Notting Hill”. También juega a la comedia romántica con el screwball de la lucha de sexos, ello entre Gosling y Blunt, con una buena química entre ambos, gracias al pastelito de momentos que el libreto les regala. Con momentos tan divertidos como cuando megáfono en mano, ella desde su cargo de directora le explica a Colt la acción que debe filmar, sobre una alienígena que se enamoró de un humano, hasta que éste la deja (doble sentido?); Cuando Colt y Jody discuten los usos temáticos de la pantalla dividida por teléfono. Están en diferentes lugares, pero comparten la pantalla gracias al uso de una técnica clásica (riéndose de ella haciéndola!); La escena del karaoke alternadas con la secuencia de Colt peleando con los malos en el camión, ella melancólica por creer Colt la ha dejado elige cantar el tema de Phil Collins “Against All Odds”, que comienza traducido con ‘Cómo puedo dejar que te marches, que te vayas sin dejar ningún rastro’; Como es meta que Jody y Colt descubren el poder del amor mientras filman una película sobre el poder del amor; y en él no va más del espejo meta, el doble de Gosling, Logan Holladay (interpreta al asistente de riesgo de Colt y lo controla antes y después de actos vehiculares riesgosos) realiza ocho vueltas y media de cañón desorientadoras en un todoterreno, está sustituyendo a un actor que interpreta a un personaje que sustituye a un actor (¿?); Hay homenajes a los especialistas que se escondían bajo trajes asfixiantes para representar a monstruos, ello cuando el prota se disfraza de ello.

 

Aunque realmente toda la revoltosilla trama no es más que un McGuffing para ir hilando secuencias de acción alocadas. Trama muy ligera, sin tensión alguna en su aire despreocupado, donde la intensidad es inexistente, todo muy liviano como para poder dar algo más de hondura, predomina siempre el humor, la fiesta, la alegría de vivir sin preocuparse por más. ‘Me gusta filmar pelis de mensaje simple, explosiones e historias de amor. Todo dentro de un envoltorio bonito’, dice la productora Gail, jugando con lo que s realmente esta película, una producción palomitera cumplidora. La acción está subordinada al tono de parodia del género, y esto hace que no se vivan con intensidad las es propias escenas (valga la redundancia) de acción. Asimismo, echo en falta algo de introspección del especialista, que lo motiva, si le gusta jugar con la muerte, si es la adrenalina su motor, al final llega a parecer su profesión sin más, habría que haber dado algo más en este aspecto. Llegando a un rush vibrante de acción. Aunuqe lo mejor es la escena post-créditos.  

 

Tiene el defecto el film que tras su presentación con voz en off del protagonista comentando su vida y profesión, tiene un bache de ritmo y le cuesta tomar impulso con las secuencias de acción con Colt en el mundo ‘real’. Lo hace cuando Colt comienza su investigación sobre la desaparición de Tom, donde se funden las habilidades de Colt, haciéndolas con red de seguridad, con la ‘vida real’, donde pelea con genial habilidad, pero de muestra debilidades y temor ante los demasiado peligroso, teniendo un gran enfrentamiento con una mujer en un apartamento, una descacharrante lucha al borde de una piscina durante un sarao con Colt drogado, todo muy psicodélico azuzado por como todo se ve en fosforescente, como muy ingeniosa la batalla de los dobles amigos Colt y Tucker contra unos mercenarios en una vivienda al borde del mar. Hay también otra pieza de acción con epicentro en un camión con contenedor cruzando Sídney destrozándolo todo, pero esta me ha resultado fuera de lugar por los cantarines CGI, aunque lo bueno es como se alterna con una reunión en un karaoke, lo que da lugar a escuchar de fondo "Against All Odds" de Phil Collins, entonado por la deprimida Blunt cuando cree que la han dejado plantada en una cita.

 

La puesta en escena es fenomenal, con una muy colorida y vistosa cinematografía de Jonathan Sela (habitual del director: “John Wick, Atómica, Deadpool 2, Hobbs & Shaw, y Bullet Train), filtrando una prístina nitidez a la acción desenfrenada, con picos fenomenales como la secuencia psicodélica de la pelea al borde al piscina, captando la acción e modo diáfano, con planos secuencia extasiantes; ello enaltecido por la edición de la islandesa Elísabet Ronaldsdóttir (otra habitual de Leitch), potenciando el ritmo, con juegos de slows enfático-paródicos, con acciones paralelas ingeniosamente trenzadas (la de set-piece del camión-container vs el karaoke), o la secuencia de la multipantalla de la llamada de teléfono; todo esto adornado por la vigorosa música, creada por Dominic Lewis (“Bullet Train”), sumando temas de AC/DC, Taylor Swift, Kiss, The Darkness, Phil Collins y la versión de Blake Shelton de ‘Unknown Stuntman’, canción principal de la serie originalmente interpretada por Lee Majors, Yungblud hizo versión de la canción de Kiss ‘I Was Made for Lovin' You’.

 

Ryan Goslin da bien con el rol de Colt Seavers, su simpatía, encanto natural, dotando de sentimientos a su personaje, tenido una notable química con Blunt, como buenísima la compenetración con Winston Duke, se nota divirtiéndose, como divertido cuando refleja que en el mundo real no hay arneses de seguridad, así como brillante aportando fisicidad, aunque paradójicamente este doble de acción tenía varios dobles (los nombro abajo). Bueno hacia el final, Colt tiene un monólogo sentido sobre cómo los especialistas en acrobacias sufren por su arte; Emily Blunt borda su papel, aporta ternura y sentimiento en su relación con Colt, estupenda en el tramo del Karaoke cantando. Lástima que no se aproveche la chispeante relación entre ella y el especialista para darles más cancha screwball como cuando discuten por teléfono (a multipantalla sobre la multipantalla), o cuando lo hacen en el set de rodaje, ella machacándolo, y es que el metraje la abandona durante la parte central, la margina, para dar protagonismo a la acción. Gosling y Blunt dijeron que se inspiraron en Leitch y su esposa productora, Kelly McCormick, para la relación romántica entre sus personajes. El papel de Blunt era originalmente el de una maquilladora, pero fue reescrito para fuera directora debutante antes de que recibiera un borrador del guion; Ryder de Taylor-Johnson estupendo como LA pedante estrella, derrochando altanería, en lo que es una jocosa parodia de los divos hollywoodienses que se jactan de hacer todas sus escenas de peligro… y es falso; Hannah Waddingham interpreta a la productora Gail Meyers, se nota disfrutando con su rol excesivo; Stephanie Hsu, en papel pequeño, poco puede hacer con un paple escasito y que le da poco jugo.

 

Spoiler:

 

Rush final: Tras un clásico trmao en que el héroe se toma por muerto, luego reaparece para aliarse con Jody. Juntos, engañan a Tom para que participe en una secuencia de acrobacias y confiese mientras está conectado a un micrófono de solapa. El resto del equipo, liderado por Dan, mantiene a raya a sus matones. Gail roba la grabación a punta de pistola e intenta escapar en un helicóptero con Tom, pero Jody ayuda a Colt a saltar al helicóptero en el aire. Recupera la grabación y cae sobre una colchoneta preparada por Dan, mientras el helicóptero se estrella con Gail y Tom dentro. El tráiler de Metalstorm se estrena en la Comic-Con de San Diego , con Jason Momoa como nuevo protagonista y Alma como nueva productora de la película; la película finalmente se convierte en un éxito de taquilla . Colt es exonerado y él y Jody vuelven a estar juntos. Los créditos se reproducen sobre un montaje de imágenes detrás de escena del trabajo de especialistas real involucrado en la realización de la película, seguido de una escena a mitad de los créditos en la que se muestra a Tom y Gail sobreviviendo al accidente de helicóptero, pero son detenidos por cazarrecompensas encubiertos (dos de ellos interpretados por Lee Majors y Heather Thomas). Al intentar escapar, Tom activa accidentalmente la pirotecnia y se hace estallar; Alma llama inmediatamente al agente de Jason Momoa.

 

 

La película utilizó acrobacias prácticas, con secuencias de acción altamente coreografiadas. Leitch afirmó: "Fue una carta de amor a las acrobacias. Sabíamos que teníamos que ser auténticos en ese mundo".  Rompió un récord mundial Guinness por la mayor cantidad de volteretas en un automóvil, con ocho volteretas y media realizadas por el conductor de acrobacias Logan Holladay. Las volteretas se realizan disparando un dispositivo similar a un cañón al suelo desde un vehículo en movimiento.

 

La serie, que se emitió de 1981 a 1986 durante cinco temporadas, fue creada por Glen A. Larson y era un placer culposo que contaba las peripecias y aventuras de un especialista en escenas peligrosas de Hollywood que, además de realizar acrobacias para películas y programas de televisión, trabajaba como cazador de recompensas en su tiempo libre. Treinta y ocho años más tarde y aprovechando la nostalgia casi patológica por todo aquello que proviene de los ochenta, se estrena la adaptación cinematográfica de la serie, la cual puede llegar a enfurecer a los puristas y fanáticos. Primero que todo, aquí Colt no es cazarrecompensas; y, en segundo lugar, el personaje de Howie Munson, el torpe socio y primo de Colt interpretado por Douglas Barr en la televisión desaparece por completo, así como Jody Banks, otra doble de riesgo y amiga de Colt que fuera encarnada por Heather Thomas, una de las mujeres más bellas de la televisión ochentera y cuyos afiches fueron tan populares como los de Farrah Fawcett en los años setenta (curiosamente, Fawcett fue esposa de Majors). Aquí, Jody Banks es reemplazada por Jody Moreno, una directora de Hollywood. ¡Ah! y los personajes de Big Jack (Jo Ann Pflug) y Terri (Markie Post), que servían como jefes y agentes de Colt, aquí se fusionan en un solo personaje de nombre Gail Meyer. Pero lo que sí se mantiene es su sentido del humor y las increíbles escenas de acción que convirtieron a la serie en todo un éxito en su época. Asimismo, la famosa canción de introducción de la serie interpretada por Lee Majors se mantiene (aunque no al inicio) y el distintivo vehículo de Colt, una camioneta pickup GMC K-2500 Wideside, sigue con el motor encendido. Con esto basta para que los expertos y los iniciados en la serie queden enganchados.

 

Ah, el equipo de especialistas de la película, está dirigido por el coordinador de especialistas Keir Beck (“Mad Max: Furia en la carretera”, “Matrix Reloaded”, “Casino Royale”, o “Sherlock Holmes: Juego de sombras”), se esfuerza al máximo. Justin Eaton hizo de doble de Taylor-Johnson y Gosling; y Ben Jenkin, Logan Holladay, y Troy Lindsay Brown también hicieron de doble de acción de Gosling.


Buen y apreciable pasarratos. Gloria Ucrania!!!

miércoles, 21 de agosto de 2024

 


HORIZON. AN AMERICAN SAGA. CAPÍTULO 1

 

Decepción mayúscula este western creado por Kevin Costner. Lo esperaba con ilusión, un proyecto de una vida para Costner, ya dándole vueltas desde 1988 que le presentó la idea la Disney, y ahora, varias décadas después ha empeñado su fortuna, dejando tirada a la popular serie de Taylor Sheridan “Yellowstone”, con su rol carismático de John Dutton para producir, dirigir, guionizar (junto a John Baird en su primer libreto para cine), y protagonizar esta fallida epopeya de la colonización del oeste estadounidense. Esta primera parte estrenada el 28 de junio en USA (tuvo la premier en el Festival de Cannes el 19 de mayo) seguido del Capítulo 2 en agosto (se rodaron las dos partes juntas). se habla de un Capítulo 3 y un Capítulo 4 que aún están por venir. Mi esperanza fundada en que Costner ha estado invilucrado en varios westerns de categoría como Silverado de Lawrence Kasdan, la exitosa propia Bailando con lobos, Open Range de él mismo, Wyatt Earp también de Kasdan, la serie tv Hatfields & Mccoys, o su glorioso paso por el neo western tv de Sheridan “Yellowstone”, pero mi gozo en un pozo. Esta errada epopeya tiene epicentro en el ficticio valle Horizon. Tres horas desordenadas, caóticas, sin ritmo, sin historias que enganchen, sin escenas a recordar, sin personajes atractivos, todo situaciones sobadas que se deslizan de modo cansino entre un maremágnum de historias que van saltando por la pantalla sin chispa alguna.

 

Tiene un arranque sugestivo con la música de John Debney (“La Pasión de Cristo” o “El Libro de la Selva”) sobre el título de apertura. Comienza en el valle de San Pedro de Arizona en 1859, tres topógrafos, uno de ellos niño, clavan estacas en el suelo para marcar una parcela de tierra junto al río. Dos niños indígenas observan desde colinas rocosas se preguntan qué hacen los blancos y por qué han venido. Los dos hermanos nativos adultos que aparecen poco después, Pionsenay (Owen Crow Shoe) y Taklishim (Tatanka Means), no sienten tanta curiosidad como están hirviendo de rabia. Unos días después, un viajero solitario encuentra los cadáveres de los topógrafos, con plumas colocadas junto a sus cadáveres como advertencia. Esas estacas se convierten en cruces sobre sus tumbas. La acción luego salta al territorio de Montana, donde Lucy (Jena Malone) dispara con un rifle a James Sykes (Charles Halford), un hombre que la ha perjudicado, y luego se va con su hijo pequeño. La dura matriarca de la familia del hombre muerto (Dale Dickey) envía a sus dos hijos, Caleb (Jamie Campbell Bower) y Junior (Job Beavers), para que se venguen y traigan de vuelta a su nieto. Uno es un idiota impulsivo, el otro es más inteligente y más controlado, además de que puede lucir una estola plateada de lobo. Mientras tanto, de vuelta al río, el nuevo municipio de Horizon, anunciado en folletos distribuidos ampliamente, ha surgido justo enfrente de esas tres tumbas. Pero cualquier sensación de seguridad se borra instantáneamente cuando Pionsenay y Taklishim lideran una emboscada mortal nocturna. Actuando en contra del consejo de su padre (Gregory Cruz), anciano de la tribu apache de las Montañas Blancas advierte del inevitable ciclo de violencia, matan a todos los colonos que no pueden ponerse a salvo e incendian estructuras que acaban de ser erigidas. Teniendo su mayor clímax la pieza cuando los indios se acercan a la casa de la familia Kittredge. Junto con un puñado de miembros de la comunidad que han ido allí en busca de refugio, el padre, James (Tim Guinee), y el hijo adolescente Nate (hijo del director, Hayes Costner) intentan contener a los atacantes mientras la madre Frances (Sienna Miller) y la hija Lizzie (Georgia MacPhail) se esconden en una trampilla debajo de las tablas del suelo. Una representación de enorme crudeza de esta masacre.

 

Tendremos un ataque indio salvaje, una madre y su hijo perseguidos por una peligrosa familia, un vaquero y una prostituta, una caravana de colonos surcando la pradera, donde el mayor problema es que hay un par de mirones, hay una cuadrilla que busca matar indios y sus cabelleras, hay unos nativos mal presentados por alguien que les hizo un gran homenaje en “Bailando con lobos”, aquí primero los presenta como salvajes sanguinarios que matan a gente por la espalda así como a niños, da igual que mucho más tarde quiera justificarlos, ya nadie puede empatizar con estos sádicos, por mucho que luego nos metan una superficial discusión entre gente mayor aborigen abogando por la no violencia ante la ocupación’ de ‘sus’ tierras, y los jóvenes pidiendo sangre, como todo el film es muy esquemático, llegando a parecer con su ‘penoso’ final el tráiler más largo jamás filmado para anunciar la segunda parte, sintiéndome estafado por esta conclusión anticlimática. Va saltando de un lado a otro sin sentido dramático alguno, el personaje de Costner tarda más de una hora en parecer, y la caravana de colonos muchos más, todo parecen aportaciones improvisadas sobre la marcha por lo nefastamente que se entrelazan a la trama lisa. Pretencioso film que ansía mucho más (pero infinitamente más) de lo que alcanza.

 

La historia se desarrolla en subtramas dispares que se desarrollan muy espaciadas, cada una con un elenco colosal que hace todo lo posible para mantener el interés mientras nunca se acercan a encontrarse. Un resumen breve: En Wyoming, un pacífico pueblo improvisado de familias cristianas blancas, un asentamiento llamado Horizon, vendido a sus residentes como una nueva tierra prometida, es atacado por una despiadada tribu apache y su joven líder fanático, Pionsenay (Owen Crow Shoe). En otro lugar, en un gélido pueblo minero de Montana, los intrigantes hermanos Sykes, Caleb (Jamie Campbell Bower) y Junior (Jon Beavers), están en una misión para rastrear a la amante de su padre, Ellen (Jena Malone), y recuperar a su medio hermano bebé. Costner hace su aparición en pantalla, como el pistolero solitario Hayes Ellison. Como un reloj, la marca de dos horas revela una tercera historia y un tercer grupo de personajes en forma de una caravana que se dirige a Horizon y está encabezada por el pionero Matthew Van Weyden (Luke Wilson). En este punto, comienza a parecer que este material era más adecuado para un drama televisivo de una hora de duración.

 

Anhela ser la Nueva La Conquista del Oeste (1962), que ya de por sí está sobrevalorada, pero esta al menos podía presumir de un plantel glorioso de intérpretes embarcados en su proyecto (James Stewart, Gregory Peck, Karl Malden, Walter Brennan, John Wayne, Henry Fonda, Lee J. Cobb, Eli Wallach, Debbie Reynolds, Thelma Ritter, y Richard Widmark), pero aquí ni eso, pues su plantilla es bastante escasita, no hay nombres que reluzcan ni sobre el cartel (solo el propio Costner, resto sin poder de reclamo con Sienna Miller, Danny Huston, Michael Rooker, Sam Worthington o Luke Wilson entre su elenco), y mucho menos sobre sus actuaciones pedestres. Entiendo es una carta de amor al género, pero Costner no tiene nombres para hacer el cesto que el cree, pues ni mucho menos está cerca de ser la obra definitiva sobre el Western, abarca mucho y aprieta precariamente. Una estructura narrativa pomposa de varias historias cruzadas que no tiene punch alguno en su ritmo cansino, donde nunca hay crescendo dramático, todo discurre de modo plano, con puntuales momentos que se eleva la acción, pero de esca entidad. Teniendo una coda alargadísima de un avance sobre la segunda parte de este insípido mamotreto, sintiéndome han colado tres horas del prólogo de lo que a lo mejor es mejor film (aunque por lo visto las esperanzas son bajísimas).

 

Se ha puesto de moda partir películas filmadas de una vez, ya lo hizo Tarantino en Kill Bill, y más recientemente Villeneuve en Dune: Part One o Spider-Man: Across the Spider-Verse o Misión imposible: Sentencia mortal - Parte 1, pero estas tenían entidad propia de espectáculo sin necesidad de su continuación, cosa que aquí da la sensación de tener que partir por la mitad sin más.

 

Este es un cuasi anti western por lo mucho que hablan diciendo poco, y a pesar del alargadísimo metraje las pocas cosas que pasan. Hay una introducción letárgica de personajes, estos muy muchos y con nula garra dramática. Tiene varias sub tramas y ninguna es sugerente, si acaso la de Costner con la prostituta Marigold (Abbey Lee), pero solo porque las otras son muy inanes. Aunque en esta hay que tragar secuencias tan grimantes en que literalmente lo viola (acaso es impotente su personaje, pues que hombre en el salvaje oeste se podría resistir al bellezon de mujer) cuando intenta dormir, ello en una tienda de campaña donde está un bebe, muy incómoda la secuencia.

 

Costner aparece como Hayes Ellison, especie de alter ego de los papeles lacónicos de Clint Eastwood en el género, pero no puede rellenar ese traje, y es que no leayuda un arco de trama que no se entiende bien su comportamiento (ojo, que he dicho que es la más ‘interesante’ de las viñetas), aquí solo parece un esbozo a medio hacer, igual en la segunda parte tiene la chicha que aquí adolece; Danny Huston como el coronel Houghton, en un papel que parece desposeído de ganas, quizás que no se cree a su rol, pues este reflexiona sobre la ‘invasión’ a la tierra de los nativos, ello con ,mentalidad propia del SXXI y no de alguien al que han mandado a ‘pacificar’ las nuevas tierras; Sienna Miller resulta chirriante con un papel desconcertante por su forma de actuar, la conocemos siendo atacada salvajemente su familia, donde muere su hijo y esposo, pero tras la llegada de los soldados USA parece esto para ella no hubiera pasado y sin más que el imperativo del guion de por medio se enamora de un teniente más soso que una pechuga de pollo de hospital (puaj!); El teniente encarnado por Sam Worthington, demostrando una vez más que no sabe mostrar expresividad alguna este rostro sin fondo; Tenemos a Michael Rooker como el sargento mayor Riordan, desaprovechado no, lo siguiente; Por hay anda Luke Wilson desubicado y más perdido que un daltónico haciendo el cubo de Rubik, ridículo en su papel de líder la caravana, parece estar preguntando como se sale de la película; Hay decenas más de personajes, pero por su bien mejor no comentarlos.  

 

Tampoco es que la puesta en escena aproveche las posibilidades épicas del entorno, cosa que si hacía Costner en ”Bailando con lobos”. La fotografía de J. Michael Muro (responsable DP de un gran trabajo en el western anterior de Costner, “Open Range”), pero aquí parece encorsetado, casi en plan de parquedad televisiva, poquitas tomas rellena la pantalla a lo algo de su pronunciado metraje, piquitas tomas panorámicas captan la grandeza de los lares, hay acantilados rojos, valles verdes y llanuras abiertas (Utah representan varias partes del suroeste y Montana), pero no me hace tilín en como debiera y esperaría. Seguramente porque la cámara digital reduce costos, pero en perjuicio de proyectar la magnificencia de las praderas infinitas del medio oeste, me faltan atardeceres mágicos que me hipnoticen, grimante que con 35 años Costner tuviera mejor ojo para filmar que con 69, es como si la experiencia de los años lo hubieran amodorrado en su sentido Homérico. Tal vez pensando que el poder de su historia en modo trableaux rellenara esta carencia, pues va servido el bueno de Kevin; Tampoco es que el funcional diseño de producción, o la música sean algo que quede.

 

Spoiler:


Rush final; El grupo de Elias y Russell se encuentra con un indígena en un puesto comercial y trata de intimidarlo, pero Janney y el comerciante evitan que la situación se convierta en un baño de sangre. Debido a la falta de resultados en la búsqueda de la banda de Pionsenay, el grupo decide perseguir a los indios donde sea que puedan encontrarlos. Dejando constancia del racismo del hombre Blanco. Se enteran de una aldea apache cercana y esperan a que la partida de caza de la aldea se vaya antes de masacrar y arrancar el cuero cabelludo a las mujeres, los niños y los ancianos de la tribu para horror de Russell. El grupo se aleja, yéndose antes de que los cazadores puedan regresar para vengarse. Tras lo que hay un pesaroso montaje que cierra la primera parte con fragmentos llenos de la siguiente entrega.

 

Costner se ha creído mucho más de lo que da, pero mucho. Gloria Ucrania!!!

domingo, 18 de agosto de 2024

 


FARGO V


Tras terminar el décimo y último capítulo de la quinta y hasta ahora última temporada de esta serie no puedo por más que calificarla de decepcionante, y más si tenemos en cuenta que sus primeros episodios me fueron frescos y muy en la línea que espero de un producto inspirado en el ‘coeniano’ film que deconstruía con mordacidad la fina línea que hay entre la maldad y el ridículo, pero hay un momento en que la serie se hunde en el ‘wokismo’ (lo del sexto y séptimo ep. Es aberrante) más vomitivo, queriendo adoctrinarme de modo zafio y simplón, cual si fuera idiota y me pudieran dar lecciones pueriles, ya estoy harto de esta tendencia moralizante de que cual tsunami lo inunda todo, una mancha parasitaría que necesita de imbéciles que sean ‘abducidos’ por este ‘buenismo’ hediondo, ejemplo de este pandemia alienante es también otra serie coetánea que comenzó de modo majestuosos 2014 y ahora ha virado en su cuarta temporada también se emponzoñaba en el barrizal woke, me refiero a “True Detective.

 

Esta es una serie de televisión estadounidense de antología de comedia negra y drama criminal creada por Noah Hawley, cada temporada posee su propia narrativa autónoma, siguiendo a un conjunto dispar de personajes en varios entornos y épocas, aunque en un universo compartido. Sin embargo, esta es la primera temporada de la serie que no tiene ninguna conexión remota con una temporada anterior ni con la película, aunque hace varios homenajes a esta última. Está ambientada en Minnesota y Dakota del Norte en el otoño de 2019. Está protagonizada por Juno Temple como Dorothy "Dot" Lyon, ama de casa aparentemente típica del Medio Oeste que vive en Scandia, Minnesota, cuyo misterioso pasado vuelve para atormentarla después de que inadvertidamente se mete en problemas con las autoridades. Jon Hamm interpreta al sheriff de Dakota del Norte, Roy Tillman, ha estado buscando a Dot durante más de una década. Otros miembros del reparto incluyen a Jennifer Jason Leigh como la suegra adinerada y arrogante de Dot, Lorraine Lyon, David Rysdahl como Wayne Lyon, el amoroso esposo de Dot y el único hijo de Lorraine, Joe Keery como el ayudante del sheriff Gator Tillman, el hijo leal pero incompetente de Roy, Lamorne Morris como el policía estatal de Dakota del Norte Witt Farr, Richa Moorjani como la ayudante de policía de Scandia Indira Olmstead, Sam Spruell como un misterioso vagabundo llamado Ole Munch, Sienna King como Scotty Lyon, la hija de 9 años de Dot y Wayne, y Dave Foley como Danish Graves, el abogado interno de Lorraine y "solucionador".

 

Tiene un comienzo cautivador en su parodia de precisamente el comienzo del “Fargo” film de 1996, con el asalto de dos tipos a la casa de una ama de casa, para secuestrarla, aquí divertidamente se le da la vuelta a la reacción de la víctima y de los raptores, y ya con ello te tiene atrapado la serie. Tenderemos como en la película a un esposo de mentalidad muy simple vende-coches, una mujer policía inteligente, pero en vez de un acaudalado suegro, hay una halcón de las finanzas de armas tomar.

 

Pero lo verdaderamente malo es la visión del mundo moderno que nos quieren ofrecer, donde todos los hombres BLANCOS son deshechos humanos, desde idiotas maridos, secuestradores, idiotas esposos que se creen con derecho de pernada sobre la mujer, como el guiñolesco jugador de golf; al que da vida un bufonesco Lukas Gage, exigiendo el tipejo gandul su esposa le satisfaga sexualmente, quien se puede creer alguien con dos dedos de luces pueda casarse con tal despojo machista? Ridículo, un insulto a la inteligencia; Líderes de sectas híper machistas ultra cristianas (Lo de meterse con el islamismo y su machismo criminal lo dejamos para otra temporada u otro siglo), regidas por el más violento heteropatriarcado, capaces de encadenar a la pata de una cama a su mujer porque no le hace caso; para más inri esta ‘secta’ tiene en Donald Trump a su Mesías, y para ello de modo machacón lo muestran en una tv en la Fox News, menuda falta de respeto a sus votantes! acaso le ha ido bien a USA con la momia Biden?; o son locos psicópatas, como los dos que al principio intentan secuestrar a Dot; En este idealizado mundo woke las mujeres son todas buenas, estas se dividen entre las maltratadas por los monstruos Blancos, las empoderadas que humillan a los blancos, la buena policía hindú, la secta de mujeres maltratadas por el hombre Blanco; hay unos empresarios que en una reunión con la Sra. Lyon la llaman ‘guapa’ de modo condescendiente, para luego irse de ‘putas’; el hijo de una anciana, donde el vikingo sicario se ha instalado de okupa es un tipejo que le suelta a la madre, ‘Hazme un bocadillo estúpida’; el Negro que sale es un tipo bueno que se sacrifica por el bien; Todo un compendio nauseabundo de un mundo paralelo que solo es el caldo de cultivo para mentes huecas, y con ello crear nuevos adeptos a esta nueva religión-secta (Tóxica) Woke. En otras temporadas había personajes femeninos fuertes ante comportamientos alienantes masculinos, pero se nos ofrecían con naturalidad, aquí se n os quiere hacer llegar a cañonazos.

 

La primera mitad contiene humor negro remanente del film y de la serie, hay ese tono de comedia corrosiva, mu cho del humor absurdo. Pero el gotea que nos va dejando la serie de pinceladas ‘wokistas’ llega un momento en que arrasa con todo y no deja lugar a la sutilidad, a la mordacidad, al ingenio, todo es brocha gorda, todo son subrayados, todo es machacar con la idea de que la América profunda es el sembrado de los males de USA, cuando en realidad es la pura esencia estadounidense, esa forma de caricaturizarla sin mesura, sin ingenio me resulta asqueroso.

 

Comienza con una pelea en cámara lenta oscuramente absurda en una reunión comunitaria para un festival de otoño que se ha salido de control. Esto culmina con la protagonista usando "accidentalmente" su taser en varias personas, incluido un oficial de policía, mientras intenta escapar con su hija y es arrestada. Aunque luego es liberada, esto termina poniendo en marcha una serie de eventos, involucrarán la primera de varias invasiones de hogares diferentes, un secuestro al estilo de la captura de la esposa de Jerry en el "Fargo" original, ello en una vivienda muy similar con los ventanales de la original, seguido de un tiroteo y múltiples escapes. Dot intentará afirmar nunca sucedieron para dejarlo todo atrás y volver a su vida tranquila. Tenemos algunos guiños a otro film ‘coeniano’ como "No Country for Old Men", como es el comienzo con una edición de planos del Oeste americano moderno, donde en el inicio del segundo capítulo oímos un monólogo del sheriff Tillman sobre el tiempo que lleva impartiendo justicia, esto entronca con un parecido soliloquio de Tommy Lee Jones en el referido y oscarizado film de los Coen del 2007, pero aun siendo parecidos el sentido es sensiblemente diferente. Hay un muy grácil episodio cuarto en el segundo aslato a la casa de Dot por parte de un grupo de encapuchados con máscaras de la ‘burtoniana’ The Nightmare Before Christmas, en un violento éxtasis de enfrentamiento con resonancias a “Solo en casa” por las trampas hogareñas contra intrusos; Hay un tramo bueno en el hospital cuando Dot juega con mordacidad con los ‘malos’ cambiando números de habitaciones (lo que da con un inocente en una situación algo comprometida). Y hablando de hospital, la escena mejor en tensión es cuando Dot espera a su marido Wayne que aperezca por la puerta de su habitación de hospital y oye las botas del sheriff, apareciendo cual Satán.

 

Juno Temple da una buena actuación de su rol que se muestra en dualidad de dulce amante esposa, con su otra vertiente de valiente heredera de McGyver con sus gadgets contra sus enemigos, da bien con el personaje, pero sin ir mucho más allá; Jennifer Jason Leigh derrocha carisma en un papel al que le aporta carácter, fortaleza, aunque le falta fondo, solo se expresa por lo que vemos al principio, no sabemos nada de ella, de su pasado, de porque tiene esa dura personalidad, arrogante, pero que luego, pues es mujer, le dan un corazoncito de sororidad (puaj!); John Hamm como el símbolo del Mal en la Tierra, es la autoridad, un misógino, además un sociópata asesino amoral, y por supuesto un machista que se rige por las sagradas escrituras bíblicas al pie de la letra, solo le falta lapidar a su mujer por adúltera (eso que hacen los que no hay coraje para meterse con ellos, los que hacen Ramadán). Ah, si esto no es ya malo de por sí es trumpista! Lo de piercings en los pezones resulta desconcertante, seguramente para ponérnoslo como un hipócrita, como si lo que le han dado de carácter no fuese suficiente, pero si hasta desprecia al hijo de modo miserable! Menuda caricatura del Marlboro Man, pestilente con la que Hamm poco puede hacer al n o ser más que eso, malo, alguien así fundamentalista, para bien o mal tiene principios en los que asirse, pero este no, es capaz de matar a diestro y siniestro, muy chusco; Sam Spruell como el enigmático Ole Munch es la nota sobrenatural que la serie siempre coloca en cada temporada, metida con calzador, pues tenemos que creer este es un vikingo venido hace siglos a USA, esto tiene entre zero y nada de importancia en la serie, su papel resulta estrambótico en como en uno momentos parece un ser todopoderoso y en otros un berzotas, una cartelización grotesca con esa falda escocesa tan discreta, y ese peinado tan propio de los Coen y su Anton Chigurh de “No es país para viejos”; David Rysdahl como el esposo bueno de Dot es una ridiculización pastueña de un esposo idiota, patético, menuda idiotez que este tenga que ser el paradigma de buen marido (puaj!); Lamorne Morris como el poli negro, su color ya nos dice en la religión woke que es buena persona, rol sin alma, más plano que una mesa; Joe Keery como el hijo del sheriff me resulta muy blandito para lo que requiere su papel; Richa Moorjani como la poli Indira resulta un apósito con una sub trama astracanada con su gili esposo, no se sabe que hace en la serie (¿?), cumplir cuota racial ( es hindú)?; hay algunos más pero es que la tommy gun se me ha quedado sin munición con que acribillar tanto desatino.

 

El episodio final sin venir a cuento nos cuelan transiciones varias de fundidos a negro que se alargan sin sentido dramático alguno. En esta coda esperábamos una gran batalla, y se nos hurta de modo ridículo, como es un chasco el naif enfrentamiento que se esperaba entre Dot y el sheriff Tillman; Como de vergüenza ajena es el comportamiento del poli negro, primero le dejan comandar un comando de operaciones especiales siendo poli de carretera? Menuda morcilla! Luego su entente con el sheriff Tillman es penoso; Como lo es todo lo referente al final del hijo Gator; Luego nos cuelan un epílogo con Lorraine haciendo de justiciera sádica visitando al sheriff para asegurarle una estancia en prisión bastante sodomita (¿?). Y ya el colmo es la visita de Munch a la familia Lyon, ejemplo de como se ha perdido en la serie el sentido de la vergüenza.

 

Si Noah Hawley no da para más que para echarse en brazos del wokismo, que deje de hacer más temporadas. Gloria Ucrania!!!

 


MENTIRAS ARRIESGADAS.

 

Jubilosa comedia de acción de James Cameron (produce, guioniza y dirige) sin más interés que hacer pasar un rato divertido y extasiante al espectador, y a fe que lo consigue con creces con un espectáculo que parodia con gran sentido del espectáculo el sub género de espías, mezclado con la comedia romántica más naif. Cameron se basa en la comedia francesa de 1991 “La Totale!” dirigida por Claude Zidi, aquí protagonizada por la estrella austriaca Arnold Schwarzenegger (tras el fracaso de “El último gran héroe”, estando deprimido por esto, vio esta cinta gala y puso en marcha el proyecto comentándole la idea a su amigo James Cameron, con el que ya había rodado las dos primeras partes de “Terminator”) como Harry Tasker, agente del gobierno USA, que lucha por equilibrar su doble vida como espía con sus deberes familiares (en el hogar se hace pasar por ordinario comercial de ordenadores), casado con la oficinista Helen, a la que da vida una radiante Jamie Lee Curtis, que en sus 15 años de matrimonio no sospecha del verdadero trabajo de su esposo, ansiando algo de vida a su aburrida vida. De secundarios está un roba escenas Tom Arnold como Gib, el ocurrente compañero de Harry, Bill Paxton como un embaucador Don Juan que se hace pasar por espía para ligar, Tia Carrere como una hermosa mercenaria con fachada de marchante de arte, y Art Malik como un fachoso terrorista islamista. El director con estos mimbres y su capacidad para las grandes producciones (esta fue la primera película en rebasar los 100 millones $ de presupuesto) ofrece un solaz film, con escenas de acción apoteósicas con aviones Harrier, helicópteros, misiles, ojivas atómicas, persecuciones explosivas por las estrechas carreteras de los cayos, persecución por grúa a vertiginosa altura, deslumbrante. En el que acidez y mordacidad guiñol deconstruye la sagrada institución del matrimonio, para con grandilocuencia y agudeza desparramar algunas secuencias y diálogos estupendos. Donde hay guiños cinéfilos muy buenos, como cuando Helen hace referencia a haberse casado con Rambo (la segunda parte de esta saga fue escrita precisamente por Cameron), pero es que además hay una escena cuasi calcada de “Rambo II”, cuando Harry escapa de la muerte por explosión al tirarse al agua en el último momento, cual hace John Rambo en una escena del mítico film de 1985.

 

Arnold Schwarzenegger aporta su habitual cinismo a su rol, algo en lo que destacaba sobre sus competidor más solemne (Stallone), no tomándose en serio a sí mismo, sabiendo su rostro es pétreo mira fijamente a cámara para intentar expresar en su sonrisa mordaz, aquí muy creíble como esposo celoso (maravilloso cuando revienta unos prismáticos mientras observa por ellos a su esposa con el otro), teniendo una gran compenetración con Tom Arnold, como también gran química con la Curtis; Jamie Lee Curtis en su papel más famoso desde la Scream Queen de la exitosa “Halloween”, su baile erótico ha pasado por derecho propio a los momentos más calientes del cine, además aporta gracia, empatía, energía, sabiendo ofrecer primero a una pastueña esposa, para luego metamorfosear en una tigresa. Curtis ganó el Globo de Oro a la Mejor Actriz por Película Musical o Comedia y el Premio Saturn a la Mejor Actriz.

 

Por supuesto todo en un tono de ligereza que es a la vez su mejor y peor arma, pues ridiculiza con niveles cuasi toon de humor absurdo el género de acción que impide cualquier atisbo de tomarla en serio (tampoco creo lo esperase Cameron): La forma tan comiquera de acabar con dos feroces canes; Que decir de ese tipo que se esconde tras un columna fina para no ser acertado por la balacera, queda la mayor parte de su cuerpo fuera de protección y que no es capaz de acertarle el malo (genial cunado sale afuera y se comprueba no le han dado en ningún lado ‘vital’; ese jinete persiguiendo a un malo en moto que se mete en un ascensor montado a caballo y pide a los que están allí pulsen por favor el botón; el arma que cae rodando por una escalera y mientras desciende va disparando a los malos que por azar va acabando con ellos; como uno de los buenos con el pie, como si fuera un balón, alza un kalashnikov y en una barrida acaba sin apenas mirar con varios malos; Diálogo: "Lo llaman la Araña de Arena", "Por qué?" "Probablemente porque suena aterrador"; el malo es grabado mientras amenaza terroristas con cámara y se le acaba la batería en mitad de la grabación, el filmador teme sudoroso las represalias; esos malos que cual aprendices avanzados de clones (Star Wars) no aciertan a los buenos en ráfagas constantes; El tono ligero es arma de doble filo, pues anula cualquier poder de tensión o intensidad dramática, pues por sui estilo sabemos lo que el futuro les depara a los protagonistas y a los malos

 

Tiene un lujoso inicio que marca el tono paródico de la cinta, haciendo sátira de las pelis bondianas. Estamos en Suiza en una noche donde hay un sarao en un palacio de un traficante de armas. Harry llega bajo agua para emerger dentro de la finca, se quita el traje de buceo y tiene un esmoquin, se infiltra en la fiesta de forma fresca, saludando a la gente como si la conociera de toda la vida. Harry conoce allí a la bella Juno Skinner (Tia Carrere), y tras un diálogo risible bailan un tango, el legendario ‘Por una cabeza’, y no por menso se nos viene a la cabeza el del icónico bailes de Al Pacino con Gabrielle Anwar en “Esencia de mujer” (1992), donde las dotes de Schwarzenegger para la danza quedan de manifiesto por como se filma su rígido corpachón. Tras lo que hace una salida aparatosa del lugar, con explosiones, con una ‘llave’ muy particular contra dos dóberman, digno de un prólogo de James Bond.

 

La película se articula mediante varias extendidas set pieces de acción con descansos para añadir secciones de humor, y a veces se unen ambos dando el film lo mejor de sí. Como es el tramo que comienza con una Destroyer pelea en unos servicios públicos, hay un tiroteo tremebundo y tras ello aparece un tipo que estaba en el retrete mirando a lado y lado (¿?). Esto sigue en el exterior con el malo con una moto por Washington DC de noche y el bueno ‘requisando’ un caballo a un policía, ambos se meten en el hotel Marriot, suben ambos en un ascensor (de cristal) diferente (Harry pide a un impactado anciano: "Presione el botón para ir al piso superior, por favor") y observándose en la distancia, acaban en el ático y el malo salto con la moto a una piscina en otro gran edifico al otro lado, y Harry pretende lo haga también el caballo, pero este en el último momento decide que no tiene ganas, genial modo toda la secuencia de aunar acción desenfrenada y humor (Harry no hubiera ido mejor por el hotel corriendo a pie que en caballo?).

 

Tras este primer bloque de las dos viñetas de acción sublime Cameron vira ingeniosamente para centrarse en el matrimonio Tusker, por casualidad Harry se entera que su esposa tiene citas con un misterioso tipo. Y Harry pone a su servicio todo el omnipotente el servicio secreto en el que trabaja, ello con la ayuda de su compañero (algo chantajeadillo por un asuntillo que al parecer era ‘chupado’). Aquí la figura de Tom Arnold como el pepito Grillo de Harry es desternillante en su labia de dobles sentidos. Capaz de hacer sobra al carismático Schwarzenegger con uan vis cómica procaz, con una gran química con el actor de Graz, con comentarios de humor negro deliciosos sobre el matrimonio o sobre las mujeres, haciendo que su colega se encienda en celos enfermizos. Hay un comentario que especialmente me sacó una sonrisa, y es que cuando lo espían con audio, Gib ante las idioteces que oye del pretendiente de Helen, dice que le cae bien este, entonces Harry lo mira con ojos asesino y Gib se replica a si mismo, ‘Me cae bien, pero habrá que matarlo!’. Exuberante en el tramo viscoso del interrogatorio; El misterioso ‘espía’ es Simon, encarnado por un excelente Bill Paxton, maravilloso como un gañán vende coches de segunda mano, los diálogos machistas que mantiene con Harry o las historias inventadas a Helen resultan descacharrantes, actor de apoyo que aprovecha para dejar huella. Y en el clímax de esta sub trama, Harry pergeña una farsa estrambótica, primero persiguiendo a Simon en su descapotable con Helen que la hace agachar para no ser vistos y el helicóptero que los espía ve una imagen quizás no sea lo que parece (¿?). Acaban en la caravana de Simon donde hay un gag slapstick arrollador cuando abren la casa móvil cual lata de sardinas y Simon acaba entre las piernas nerviosas de Helen (¿?); Tras ello un chancesco interrogatorio; Y todo esto culmina en una ya Icónica escena de lap dance de Jamie Lee Curtis ante un hedonista (¿?), toda la escena es Antológica llevada por una nunca jamás más sensual en pantalla actriz hija de Janet Leigh. Por ser tikis mikis, me falla que la música que oímos durante el sexy baile sea extradiegética.   

 

Y tras el baile con lencería negra erótica, hay el viraje final a la acción desenfrenada, con el secuestro de Harry y Helen por parte de los terroristas. En realidad, esto no tiene sentido, pues Harry y compañía no estaban muy al tanto de lo que hacían estos, lo que hacen al raptarlos es colocarlos en el meollo del asunto. Pero por el tono alegre y sin pretensiones algunas esto se perdona. Y comienzan los tiroteos, los muertos, las explosiones, las persecuciones, una huida hacia adelante alocada en su inventiva, con los puntos álgidos de la persecución por la carretera sobre infinitos puentes en los cayos con derrumbes de pista, con un furgón que queda balanceándose con terroristas dentro pero entonces aparece … (No quiero spoilear). También habrá una pelea de gatas en una limusina (estos terroristas serán malos, pero tiene sus códigos morales, como no amarrar a sus secuestrados ¿?). Todo derivando en una gloriosa pieza de un helicóptero intentando atrapar a uno de los buenos antes que su vehículo caiga al mar por una rotura de la carretera; Para a continuación cambiar de marco de acción de los cayos floridanos, a la cima de un rascacielos en Miami, donde el héroe irrumpe en Harrier, qué más da que no tenga sentido alguno que su intención sea rescatar a su hija y llegue soltando un tsunami de disparos que destrozan literalmente toda una planta, esto no tiene sentido orgánico alguno, cualquiera con dedos de luces no piensa salvar a su hija a cañonazos, pero la coherencia narrativa no es el fuerte del film. Para culminar en una pieza de suspense con escenario inerte de una elevada en las alturas grúa, con el malo persiguiendo a la chica buena por una llave que esta lleva (por mor de la ley no escrita de que los malos aquí no amarran a sus rehenes ¿?; por cierto, para que quiere la llave, la ojiva ya ha sido tomada por las fuerzas USA?). Todo un número de acrobacias que se atomiza con el Harrier suspendido en el aire, coronado por uno de esos finales tan ochenteros de una frase pidiendo mármol; para pasar a un epílogo gracioso que entronca con el del inicio, con aparición de Simon y también el ‘Por una cabeza’.

 

Todo esto surtido por una soberbia puesta en escena, propia de la superproducción que es, la más cara hasta esos momentos, brillando la plata por todos lados. Desde la el fastuoso diseño de producción de Peter Lamont (“Aliens, el regreso” o “Titanic”), llevándonos por escenarios dadivosos, castillos suizos, hoteles a caballo, o los cayos de Florida; esto realzado por la luminosa fotografía de Russell Carpenter (“Terminator” o “Avatar”), amoldada a la acción de modo sublime, simplemente sibarita en la escena del lap dance; Y ello punteado por escenas de acción arrolladores asistidas por unos efectos visuales Homéricos en como desbordan realismo, lejos de la parafernalia desnaturaliza dora de los CGI, por mor de ser la primera producción importante para la compañía de efectos visuales Digital Domain cofundada por Cameron (Nominados al Oscar, ganaron los de “Forrest Gump”)  

 

Spoiler:

 

Rush final: Harry pilota un avión de combate Harrier de despegue vertical, sobrevuela cerca de un rascacielos de Miami mientras su hija adolescente se aferra precariamente a la cubierta de la cabina y un villano cuelga de su cinturón de uno de los misiles montados en las alas. Arnold arma el misil y lo dispara, con el terrorista atado, a través del rascacielos, el misil derriba un helicóptero transportaba a otros terroristas; Un año después, Harry y Helen trabajan juntos como agentes de Omega. Mientras están en una misión en una fiesta formal, se encuentran con Simon, trabaja como camarero y finge ser espía. Simon huye asustado después de que se revelan y amenazan con matarlo. Harry y Helen bailan el Tango, mientras Gib les ruega se tomen su trabajo en serio.

 

Una diversión notable de calidad, el cien se hizo como entretenimiento y esta película lo es con creces. Gloria Ucrania!!!

 

PD. Aparece el legendario Charlton Heston como jefazo de Omega (parchado) aportando su poderoso carisma.

jueves, 15 de agosto de 2024

 


PRESUNTO INOCENTE.

 

Con motivo de haber visto la (decepcionante) serie “Presunto Inocente” (2024) de Apple TV+ (renovada para una segunda temporada) me he decidido a volver a ver la película que se hizo por el epónimo libro de Scott Turrow de 1987, y con igual título en 1990, tan parecidas las historias, pero con muchos puntos diferentes, siendo superior esta dirigida por Alan J. Pakula. Film de sub género de juicios guionizado por el propio Pakula junto al acreditado Frank Pierson (“La leyenda del indomable” o “Tarde de perros”), adornado por el suspense de nos saberse si el acusado es culpable o no, se juega con la ambigüedad hasta el final, involucrando con ello al espectador que hace sus cábalas sobre lo que sucedió realmente, mientras pruebas en uno u otro sentido van apareciendo. Teniendo entre sus alicientes un sabroso elenco interpretativo encabezado por un desconcertante (por lo extraño de Indiana Jones en este tipo de roles) Harrison Ford, más Brian Dennehy, Raúl Juliá, Bonnie Bedelia, Paul Winfield y Greta Scacchi. La historia sigue a Rusty Sabich (Ford), un fiscal que es acusado del asesinato de su colega y amante Carolyn Polhemus (Scacchi).

 

Ello desarrollado con firmeza, dejando poso en su devenir, con ritmo pétreo, marcando los caracteres, tocando temas como la infidelidad, el engaño, el arribismo, el sexo como modo de trepar, la corrupción (policial y judicial), el abuso infantil, o las fallas en el sistema judicial. Pero sobre todo es fruto de una tendencia de sermonear sobre los peligros de las ‘aventuras’ extra maritales, como se pueden volver contra el que lo comete, en una tendencia moralista que tuvo otro de sus epítomes en “Atracción fatal” (1987). El film peca en lo referente a varias sub tramas que se abren que desvían la atención de lo neurálgico, que pueden provocar cierta confusión, somo por ejemplo todo lo que tiene que ver con las rencillas políticas. Un entretenido thriller que sabe mantenerte atrapado en querer saber quién fue el asesino, se desvela, aunque con una laguna (*spoiler).

 

Arranca con un prólogo en una sala de juicios vacía, con la cámara enfocando a las sillas del jurado, todo en tonos macilentos sombríos marrones, sobre la imagen un monólogo del protagonista Rusty Sabich (Harrison Ford) comentando su labor como fiscal, en una disertación ambigua sobre lo que puede ser realmente la justicia, donde no se trata tanto de encontrar la verdad, sino, simplemente de ganar y no perder. Tras ello comenzamos y al poco ya tenemos el asesinato, con ello un tramo en que el protagonista fiscal juega de modo extraño a sembrar las dudas en el espectador. Lo vemos en una relación familiar supuestamente feliz con su hijito y esposa cariñosa. Hasta que todo se destapa y se sabrá le fue infiel a su esposa con la fallecida, y con ello él será el principal sospechoso. Siendo acusado del crimen llegaremos al juicio, y con ello el tópico carrusel de testimonios, interrogatorios, conflictos entre abogados, con el juez de por medio, las mentiras, medias verdades, secretos que salen a flote, jugando hábilmente con el espectador en un tira y afloja entre parecer inocente y parecer culpable a cada paso que damos. Las pruebas le acusan (huellas dactilares, muestras de esperma, fibras de alfombras); Para en la segunda parte entrar en la parte de la acusación y juicio, donde verdades, mentiras a medias se cruzarán en un juego de testimonios algo dirigidos por inquinas pasadas, donde lo importante no es encontrar al culpable, es vencer, y con ello queda malparado el sistema judicial, para desembocar en rush final impactante.

 

Entre medias asistiremos a como la justicia se puede retorcer, en medio de manipulaciones, corruptelas, sexo furtivo, ello con el trasfondo de las ambiciones políticas, donde la más lista y con menos escrúpulos resulta ser la fallecida. Carolyn es una mujer empoderada, fuerte de carácter sabe lo que quiere y no duda en utilizar sus armas de sexy y hermosa joven para ir ascendiendo, lo cual, en un rasgo machista, es visto por hombres (celosos) y mujeres (envidiosas de su atractivo) como un peligro, pero esto es legítimo? SI! Además la fotografía del Maestro de las Tinieblas, como era conocido en el mundillo del cine el DP Gordon Willis (“El Padrino” o “Manhattan”) la ilumina de modo fascinante para traspasarnos la lujuria que transmite: Sobre todo esto en la escena en que Pakula debe traspasarnos la obsesión sexual que Rusty tiene en Carolyn, en una escena de sexo en el despacho, donde los dos se enzarzan en sexo sudoroso de alto voltaje sobre la mesa, donde la cámara coge el rostro libidinoso de ella haciéndonos partícipes de la carnalidad que supura, sexo atávico (hay otro?), salvaje, ello adornado por una punzante música del gran John Willianms (“Star Wars” o “Indiana Jones”), que enfatiza in crescendo el tórrido tramo con acordes punzantes piano y cuerdas, todo en subida de temperatura que desemboca en el orgasmo climático reflejado en el plano final del sumun del rostro de Carolyn. Ella ve las debilidades del hombre para aprovecharse. La milanesa Greta Scacchi encarna a esta seductora femme fatale en los flash backs con una beldad fría que consigue derretirnos en la (mencionada) escena de sexo con Rusty, dota en su poco tiempo en pantalla a su rol de inteligencia y agudeza en saber manipular.

 

Harrison Ford da una actuación sorprendente por como juega con la ambigüedad en su rostro, con ese corte de pelo neutro extraño, siempre con cara de sorprendido, dubitativo, bueno en este sentido; Bonnie Bedelia como la esposa del acusado, da bien con el rol de amante esposa a pesar de la infidelidad del marido, también emitiendo dudas en su comportamiento; Raul Julia como abogado defensor aporta carisma proyectando inteligencia; Brian Dennehy aporta su gran carácter fuerte como sibilino superior de Rusty; Joe Grifasi como el fiscal Molto es algo caricaturesco; Paul Winfield como el juez, dota de personalidad al ‘árbitro’, ello con algún secretillo de por medio (aunque muy grimante, *spoiler).

 

Spoiler:

 

Rush final: La defensa de Stern se basa en que Della Guardia y Molto han incriminado a Rusty. Durante el interrogatorio del forense, se revela que Carolyn se sometió a una ligadura de trompas, por lo que no tenía motivos para usar el anticonceptivo espermicida que se encontró en ella. Stern afirma que la única explicación de esta discrepancia es que la muestra de líquido en realidad no se tomó del cuerpo de Carolyn. Es que Carolyn no pudo habérselo puesto para evitar enfermedades venéreas? Esto se obvia!; Basándose en la desaparición del vaso de cerveza, la falta de motivo y el hecho de que la muestra de líquido no tuviera sentido, el juez Lyttle desestima los cargos. Rusty se enfrenta a Stern por sacar a relucir el expediente de soborno en el caso. Stern revela que Lyttle tuvo un breve encuentro sexual con Carolyn. *Esto me resulta un quíntuple salto mortal, o más, pues nótese que Carolyn se había acostado, con el ayudante del fiscal (Rusty), el fiscal (Raymond), y ya en el no va más también en su ascenso lo hace con un juez mucho mayor que ella, la ponen a la muerta como a una ninfómana del poder; Stern l y Raymond sabían que Lyttle aceptaba sobornos, y aunque Lyttle había ofrecido su dimisión, Raymond sentía que era un juez brillante y merecía otra oportunidad. Dejando al duda de si sobresee el caso por justicia o por temor al chantaje; Lipranzer (John Spencer) se reúne con Rusty y le regal sobre el vaso de cerveza que falta, explica que nunca lo devolvió como prueba cuando la investigación pasó a manos de Della Guardia y Molto.  Rusty lo arroja a un río. Dejando al espectador pensando que Rusty es culpable; Poco después, en casa, Rusty descubre un hacha pequeña con sangre y pelo. Y aparece Barbara, que le cuenta a Rusty que asesinó a Carolyn por culpa de la aventura. Expresa que había dejado pruebas suficientes para que Rusty supiera que había cometido el crimen, pero no esperaba que lo acusaran. Esto del hacha con sangre y cabello de Carolyn es un ‘goof’ del relato, pues la policía estuvo en la casa registrándola buscando pruebas, y el hacha no estaba precisamente buen escondida, se supone debieron buscar en el garaje, ERROR! Y porque dejó allí la esposa el hacha? Porque no deshizo de ella? Porque ni siquiera lo limpió?; En una voz en off, Rusty explica que el asesinato de Carolyn sigue sin resolverse, ya que juzgar a dos personas por el mismo delito es "una imposibilidad práctica" y que nunca podría separar a la madre de su hijo, incluso si fuera posible procesarla. Rusty afirma que hay un culpable y un castigo en este caso, lo que significa que se siente culpable porque sus acciones llevaron a la muerte de Carolyn.

 

El film ha sido tildado de machista-misógino por como refleja a las mujeres, bien como trepas amorales que utilizan el sexo para medrar en el trabajo, o bien como celosas asesinas; racista por la visión que se da de los negros, hasta el juez es un negro corrupto; y hasta homófobo, pro la visión tóxica que se da de ellos.  

 

Final en el libro de Turrow; El tiempo pasa y la relación de Rusty con Barbara empeora, después de que el juicio aparentemente la había reparado. Cuando ella anuncia su intención de dejarlo y llevarse a su hijo, Rusty explica su deducción de que ella mató a Carolyn, como venganza por la mujer que casi destruyó a su familia; ella admite que él tiene razón. Durante una visita a la casa de Rusty, Lipranzer revela que tiene el vaso de bar perdido, que se produjo debido a la mala gestión descuidada de Molto y al propio desinterés de Lip en ayudar a la fiscalía. Rusty le habla a Lip sobre cómo y por qué Barbara cometió el asesinato mientras limpiaba a fondo el vaso, destruyendo la única evidencia real en su contra. Especulan si Barbara dejó el vaso en la escena porque quería que Rusty supiera lo que había hecho, o porque quería que lo condenaran. Rusty decide que no importa, ya que no puede privar a su hijo de una madre y, a excepción de Lip, nunca admitirá la verdad ante nadie. Della Guardia, cuya reputación quedó destruida por el juicio, pierde una elección revocatoria y Rusty es designado para terminar su mandato, aunque sus perspectivas profesionales más allá de eso son inciertas. La novela termina con Rusty reflexionando sobre el asesinato de Carolyn, que sigue sin resolverse oficialmente casi un año después. Se pregunta qué lo llevó a involucrarse en la aventura que, en última instancia, causó todo lo que sucedió, y concluye que fue un intento de escapar de la crisis existencial que lo ha atormentado durante la mayor parte de su vida adulta, incluso si lo que ella le ofreció nunca fue más que una fantasía.

 

Me queda un film entretenido, que te engancha, pero algo arrugado por el tiempo, aún así buen thriller. Gloria Ucrania!!!

jueves, 8 de agosto de 2024



ALIEN 3. 


Fallida tercera parte de la mítica franquicia “Alíen”, comenzada en 1979 por el director inglés Ridley Scott, su enorme éxito dio lugar a la secuela “Aliens, el regreso” en 1986, dirigida esta vez por James Cameron, considerada una de las mejores secuelas jamás realizadas, llevando consigo otro gran triunfo taquillero, la FOX creía tener la gallina de los huevos de oro, lo que provocó la producción de la tercera parte. Esta muy problemática, pasando el guion por muchísimas manos, demasiadas ideas se mezclaron, diferentes directores estuvieron en la terna. Una filmación caótica, pues el guion ni siquiera estaba terminado cuando se comenzó a rodar, todo este caos provocó que el director de 29 años debutante (hasta entonces exitoso director de videoclips) David Fincher, renegara del resultado final, tanto que cuando en 2003 se le ofreció la oportunidad de crear su propia edición del film este se negó, lanzándose una versión revisada de la película conocida como ‘Assembly Cut’ sin participación de Fincher, con más de media hora de metraje añadido, que rellena lagunas de la cinta, esta es la que acabo de ver (la teatral la vi en su momento). El guion final es acreditado a David Giler (“Aliens, el regreso”), Walter Hill (“La huida”) y Larry Ferguson (“La caza del octubre Rojo”), a partir de una historia de Vincent Ward (“Navigator, una odisea en el tiempo”), sobre los caracteres creados por Dan O'Bannon y Ronald Shusett, ambientada inmediatamente después de los eventos de “Aliens” (1986), Ripley y un organismo alienígena son únicos sobrevivientes de la nave espacial Sulaco de los Marines Coloniales luego de que una cápsula de escape se estrellara en un planeta que alberga una colonia penal poblada por reclusos masculinos violentos. Producción que pretendía retornar espíritu de la original, un solo alíen desmenuzando a casi indefenso grupo de víctimas potenciales, esta vez, en lugar de mineros en la Nostromo, convictos rapados al cero en un inhóspito planeta llamado Fiorina "Fury" 161. Modificando notablemente paleta de colores de la serie, aquí predominando tono ocre típico de Fincher, gracias a la macilenta fotografía de Alex Thomson (“Excalibur” o “Manhattan Sur”), con una reseñable toma subjetiva desde el punto de vista del alíen mientras persigue a humanos deslizándose a toda mecha por el techo por los laberínticos pasillos.

 

Después de los eventos de Aliens, un huevo eclosiona a bordo de la nave espacial Sulaco de los Marines Coloniales, liberando un abrazacaras. Se inicia un incendio y la computadora de la nave lanza una cápsula de escape que contiene a Ellen Ripley, Newt, Hicks y el androide dañado Bishop; los cuatro están en estasis criónica. La cápsula se estrella en Fiorina "Fury" 161, una fundición y una instalación correccional de máxima seguridad habitada por reclusos varones con una predisposición genética al comportamiento antisocial, dónde ni hay naves para salir del planeta, ni tiene armas. Los reclusos recuperan la cápsula estrellada y sus pasajeros. Ripley es despertada por Clemens, el director médico de la prisión, quien le informa que ella es la única sobreviviente. El director de la prisión, Harold Andrews, dice su presencia puede tener efectos perturbadores. Ripley insiste en que Clemens le haga una autopsia a Newt y que los cuerpos de ella y Hicks sean quemados posteriormente, temiendo que Newt pueda estar llevando un embrión alienígena. A pesar de las protestas del director y su asistente Aaron, se realiza la autopsia y no se encuentra ningún embrión. El funeral continúa con el líder espiritual Dillon pronunciando un discurso mientras los fallecidos son arrojados al horno. En otra parte de la prisión, un alienígena cuadrúpedo sale de un buey.

 

Por supuesto teniendo de protagonista a Sigourney Weaver, repitiendo su papel de Ellen Ripley, papeles adicionales interpretados por Charles Dance, Brian Glover, Charles S. Dutton, Ralph Brown, Paul McGann, Danny Webb, Lance Henriksen, Holt McCallany, Pete Postlethwaite y Danielle Edmond. Fincher toma elementos de 2001 de Kubrick y Terminator 2 de Cameron, pero todo ello pasado por un tapiz denso y con ello lento, quiere ser más y no da para ello, el ego de Fincher firma cheques que su aun en ciernes ‘maestría’ no es capaz de cubrir. No sabe dar dinamismo a la trepidante historia del xenomorfo abrazacaras, y con ello tiende a ser espeso en los tramos que quiere dar profundidad a los personajes, resulta pedante en la forma en que quiere dar trascendencia religiosa a lo que sucede, chirría en colarnos un romance exprés, naufraga en reflejar esta inverosímil colonia cuasi monacal de presos, no tiene sentido alguno, un pegote que nadie se puede creer en lo que se nos explica.

 

La forma en que nos quieren colar una nueva plaga alíen en este planeta es ridículo, por tanto ni tan siquiera se calientan la cabeza intentando explicar como puede el Alíen haberse introducido en el Sulaco, como pudo ‘violar’ a uno de los hibernados (no quiero spoilear), y menos aún reproducirse, pues en la anterior entrega dejan claro que el aparato reproductor de la ‘Reina’ queda destruido, por lo que dar continuación sin más es pegar un tiro a la estupenda “Aliens”, como lo es restar toda la épica a la de 1986, pues la niña por la que Ripley luchó en la pretérita y que salvó, aquí se la ventilan durante los créditos iniciales, ridículo tiro en el pie de la saga. Amén de otras muchas lagunas e incoherencias con respecto a lo visto en las anteriores, desde como el Alíen aquí nada más ‘emerger’ de un ser vivo ya está completamente desarrollado, mientras en las otras es una especie de renacuajo amorfo, el tamaño aquí ha disminuido de modo chusco en comparación con los humanos. Pero es que incluso los efectos visuales aparecen peores que los de seis años atrás, incidiendo en los entonces pujantes CGI exitosos de “Terminator 2”, pero aquí parecen una versión de rastrillo de estos, reflejados en un Alíen penoso, dónde el terror que provocaba en la s anteriores ha quedado muy atenuado y sobre todo en ciertos momentos que parece un holograma sobre la pantalla.

 

Es una película donde no hay una sola escena de acción a recordar, tiene una buena ambientación, fruto de la buena labor del diseñador de producción bi-oscarizado (por “Star Wars” y “En busca del Arca Perdida”) Norman Reynolds, pero es un claro remanente de las anteriores, un lugar tétrico surcado por pasillos que se cierran por compuertas, nada original, no hay apenas tensión, no hay suspense, todo acontece de modo mecánico, pues tenemos a un grupo de machos que van cayendo uno tras otro masacrados por la bestia, y los que quedan terminan planeando como acabar con ella, y punto. Nos cuelan por medio una crítica antibelicista sobre que la compañía Weyland desea cazar vivo al alíen con objetivo de aprovechar sus capacidades en la guerra, pero esto resulta muy manido, sin matiz alguno, metido con fórceps. Película que tiene dificultades para ser un entretenimiento, le cuesta enganchar, discurre a trompicones, queriendo abrazar lo místico de modo chusco, hasta que en la parte final se desencadena el ritmo, pero esto haciéndolo más vistoso, nunca consigue dejar de ser una iteración low cost de las anteriores. 

 

A la teniente Ripley se le da un carácter cansado y ajado, es un acierto (de los pocos del film), a lo que contribuyen algunos buenos momentos de la prota, con ese gran momento en primer plano icónico del alíen oliéndola mientras ella se mantiene rígida contra la pared, o cuando le dice al bicho:  "Has estado en mi vida tanto tiempo, que no puedo recordar nada más".

 

Ripley mantiene una buena química con el médico de la prisión (Charles Dance), pero de buenas este desparece, y nada deja, no ha llegado a crearse un vínculo con el espectador que le afecte; Se trae de la anterior entrega al robot Bishop, o lo que queda de él, pero este inserto es arrinconado ipso facto sin más; Tenemos una primera parte donde incomprensiblemente Ripley se niega a decir el temor que tiene a que un alíen esté allí con ellos, se niega a contar nada de ello, por qué? Se siente! Hasta que el bicho se hace presente de modo diáfano. La actuación de Sigourney Weaver es muy buena mimetizada con el rol de Ripley, una heroína con su poderoso némesis, aquí ya con un aura trágica remanente de lo sucedido mientras hibernaba, con ese corte de pelo rapado que le confiere un halo a lo Juana de Arco de la Maria Falconetti de Carl Theodore Dreyer, demostrando el temor y la desesperanza en la que está sumida, lástima que el resto del guion no acompañe.

 

El epicentro es la prisión y campo de trabajo. Que se erige en una especie de monasterio con monjes con celibato, que fueron presos y otros guardias, y de modo nadas creíble nos dicen que cuando acabaron las condenas de los presos estos y los guardias decidieron quedar se allí, se podría entender si los caracteres que viéramos allí fueran de ascetas frugales, pero lo que vemos son tipos aviesos, violentos, que se calientan con la presencia de la mujer, no tiene sentido nos quieran colar esto. Además, aderezado por un aura religioso que lo meten a empellones, con oraciones y charlas sobre demonios y liberación, cuando se nota que la mayoría de pobladores del planeta son algo más que agnósticos. Eso sí, su imagen si es la de una especie de abades, con ropas marrones y con rapado de cabeza (se dice que por plaga de piojos).

 

La película incide en lo que Ridley Scott potenció al cambiar el rol de Ripley de un hombre en el guión a una mujer sobre el celuloide. Pues el director de “Blade Runner” pensó eso hacía al personaje más vulnerable y original, y a la película más convincente, al colocar al ‘sexo débil’ en un entorno de machos con la testosterona a flor de piel en micro comunidades faltos de féminas. Y aquí esto no falta, incrustando a la protagonista en un lugar íntegramente poblado por hombres rudos, dónde incluso tiene un intento de violación grupal.

 

Aquí hasta lo bueno hay que mirarlo con el ceño fruncido, pues el final resulta muy poético y muy bíblico, conmovedora conclusión. Pero en el momento que piensas que s muy similar a un blockbuster del año anterior te hace pensar donde están las ganas de ser original (*spoiler).

 

Spoiler:

 

Porque Ripley tras saberse ‘preñada’ del alíen dice que es una alien reina ponedora de huevos? Como lo sabe? Como ha sido ‘fecundada’ Ripley? 

 

El Alíen no la matará debido al embrión que lleva, por lo que Ripley le ruega a Dillon que lo haga; él acepta solo si ella ayuda a los reclusos a matar al Alíen primero. Forman un plan para atraer al Alíen a las instalaciones de moldeo de la fundición, atraparlo y ahogarlo en plomo fundido. El plan de cebo y persecución resulta en la muerte de todos los prisioneros restantes, excepto Dillon y Morse. Dillon se sacrifica para posicionar al Alien hacia el molde mientras Morse vierte el plomo fundido sobre ellos. Aunque el Alíen está cubierto de metal fundido, escapa del molde. Ripley activa los rociadores contra incendios, haciendo volar al Alíen en pedazos por un choque térmico. El equipo Weyland-Yutani llega, incluyendo comandos y un hombre que se parece a Bishop y dice ser el creador de Bishop. Intenta persuadir a Ripley para se someta a una cirugía para extraer el embrión de la Reina Alíen, alegando que será destruido. Ripley se niega y retrocede a una plataforma móvil, Morse coloca sobre el horno. El equipo Weyland-Yutani le dispara a Morse en la pierna para detenerlo; Aaron golpea al que se parece a Bishop con una llave inglesa y los comandos lo matan a tiros (que aporta esto y ver su oreja colgando? Los guionistas no han oído hablar de ‘El arma de Chéjov’). Ignorando las súplicas de que les entreguen el embrión, *Ripley se arroja al horno (en la versión teatral: manteniendo cautiva a la reina infante mientras sale de ella; en lo que s un claro plagio del film “T2” donde también de modo voluntario el Terminator decide inmolarse en acero fundido). Las instalaciones se cierran. Morse, el único sobreviviente, es llevado mientras se reproduce la última grabación del libro de registro de Ripley del Nostromo.

 

Una pequeña cantidad de tomas contienen imágenes generadas por computadora, más notablemente la cabeza del alienígena que se agrieta una vez que los aspersores causan un choque térmico. Otros elementos CGI incluyen sombras proyectadas por el alienígena títere de varilla y escombros en el aire en escenas al aire libre. David Fincher quería que el alienígena fuera "más un puma o una bestia" en lugar de la postura humanoide erguida de las películas anteriores, por lo que se contactó al diseñador del alienígena original, HR Giger, para generar nuevas ideas de bocetos. Sus revisiones incluyeron piernas más largas y delgadas, la eliminación de "tubos" alrededor de la columna vertebral y una idea para una "lengua" alienígena afilada en lugar de las mandíbulas secundarias. Trabajando desde su estudio en Zurich, Giger produjo estos nuevos bocetos que envió por fax a Cornelius de Fries, quien luego creó sus contrapartes modelo con plastilina. El único de los diseños de Giger terminó en el proyecto final fue un alienígena "Bambi Burster" tenía piernas largas y caminaba en cuatro patas. Film nominado al Oscar a mejores efectos visuales (Ganó el premio el film “La muerte os sienta tan bien”).

 

Cuando La Fox quiso montar una versión del director de “Alien 3” para su lanzamiento en formato de vídeo doméstico, Fincher se negó a participar. En su lugar, se creó una versión extendida llamada "Assembly Cut" basada en sus notas de la sala de edición y se publicó en el box set Alíen Quadrilogy de 2003, supervisada por el productor Charles de Lauzirika. Esta versión de la película dura 144 minutos e incluye más de 30 minutos de escenas extendidas, alternativas y eliminadas previamente y elementos alternativos clave de la trama. Un ejemplo de las diferencias en la trama es que, en la versión cinematográfica, el Alíen sale de un perro, mientras en la versión de montaje el Alíen sale de un buey muerto. Otro ejemplo es que, en la versión cinematográfica, Ripley y los reclusos no logran atrapar al Alíen en la sala de residuos tóxicos, mientras que en la versión de montaje lo logran. Golic, el prisionero enloquecido que queda fascinado con el Alíen, luego escapa de la enfermería, mata al prisionero que está de guardia y deja que el Alíen se suelte a costa de su propia vida. Esto llena el vacío argumental que supuso el destino de Golic, ya que en la versión cinematográfica simplemente desaparece de la película tras la muerte de Clemens en la enfermería. Además de Golic, se revelan más destinos de personajes secundarios, lo que llena más huecos argumentales. En el final teatral Ripley se lanza sobre el magma y mientras cae el alíen de su interior sale de su barriga esperando huir de su letal destino, pero la protagonista lo coge con su mano para los dos inmolarse: En la versión extendida simplemente Ripley cae sobre el magma sin aparecer el xenomorfo.

 

Errado film, que solo es un mediano pasarratos, que es un bajón con respecto a las dos primeras partes. Gloria Ucrania!!!

 


Furiosa: De la saga Mad Max


Decepcionante quinta entrega de la saga post apocalíptica “Mad Max”, que comenzó hace 45 años (en 1979, con asfalto como protagonista, aquí ya inexistente). Tras la Homérica “Mad Max: Fury Road” (2015) hace nueve años, una de las cimas de la acción desenfrenada híperimaginativa en su parafernalia visual after punk, esperaba con devoción esta precuela spin off que relata la vida anterior a su encuentro con Max de la carismática Furiosa (encarnada en la primigenia por Charlize Theron), pero mi sensación general ha sido de producto demasiado dependiente del original, y lo peor es que en todo pierde. El hecho de incluir entre los créditos finales clips de “Fury Road” nmop hace más que añorarla, y darse cuenta uno del bajón que ha sido esta. Como bien he leído es como comerse por segunda vez una onza de chocolate, sabes que está buenísimo, pero ya es algo que has saboreado antes y no tiene el mismo efecto, y encima aquí da la sensación de estar recalentada. El ritmo es atrompicado, la imaginería apabullante e impactante de la precedente es calcada en esta, sin sumar nada a la misma, el guion tiene muchas lagunas y hay dar muchas licencias, la acción es un cuasi calco de la de 2015, pero pareciendo un esbozo de lo que fue, cuasi descartes de la anterior, encima es que dónde la protagonizada por Hardy &Theron eran pocos los desnaturalizadores f/x CGI, aquí son aparatosos, hasta para crear escenarios, restando el brillo y fulgor pretérito. Dirigida y producida por George Miller, escribió el guion con Nico Lathouris (creador de la saga), primera no se centra en el protagonista de la serie Max Rockatansky, sino que actúa como una precuela derivada de una historia de origen para el personaje de Fury Road Furiosa, interpretado por Anya Taylor-Joy y Alyla Browne en la precuela. Ambientada entre 15 y 20 años antes de los eventos de Fury Road, la película sigue la vida del personaje principal durante más de una década, desde su secuestro por las fuerzas del señor de la guerra Dementus (Chris Hemsworth) hasta su ascenso al rango de Imperator. Tom Burke también interpreta a Pretorian Jack, comandante militar se hace amigo de Furiosa.

 

Varios miembros del elenco de Fury Road regresan en papeles secundarios, incluidos John Howard, Nathan Jones y Angus Sampson que repiten sus personajes. Todas las marcas registradas familiares están ahí: interminables dunas de arena, autos tuneados y camiones monstruo, mutantes merodeadores con disfraces de piratas y nombres curiosos (Scrotus y Erectus ¿?). Parte de lo malo es su argumento, más sobado que los huevos del toro de Wall Street, una simple historia de venganza sin ningún matiz, y lo hace de modo cansino, primero con un prólogo que empieza de modo atractivo, pero se estira más que la visita de los suegros, pretende Miller dar más fondo a los personajes y termina fallando al hacer un relato otrora trepidante, aquí farragoso y atascándose, con demasiados puntos muertos, haciéndose con ello un metraje alargadísimo. Tras el mencionado prólogo que iremos luego saltando por varias elipsis divididas por cinco capítulos titulados en sobreimpresión en pantalla, donde Furiosa estará en medio de una Guerra entre clanes estrafalarios. En el colmo del  desengaño, cuando espero al menos el clímax final me reconcilie con el film, mi gozo en un pozo, primero hacen una grosera elipsis sobre la supuesta gran batalla, un insulto al espectador ávido de adrenalina salvaje, se ve se gastaron el presupuesto en la escena central de acción con epicentro en el camión plateado, y en la escena de la fortaleza de Gastown, y cuando vinieron a darse cuenta el presupuesto no daba para no más y nos cuelan un duelo final ridículo, solo salvable por el monólogo del villano sobre la vendetta.

 

Décadas después del apocalipsis, Australia es un páramo radiactivo y el Lugar Verde de Muchas Madres (especie de Edén) es una de las últimas áreas restantes con agua dulce y agricultura. Los asaltantes descubren el Lugar Verde mientras dos niños, Furiosa y Valkyrie, están recogiendo melocotones. Furiosa intenta sabotear sus motocicletas, pero los asaltantes la capturan como premio para su líder, Dementus (Chris Hemsworth) de la Horda de Motociclistas. Mary, la madre de Furiosa (Charlee Fraser) los persigue hasta el campamento de la Horda, matando a todos menos a uno de los asaltantes, que lleva a Furiosa ante Dementus. Furiosa hiere mortalmente al último asaltante antes de que pueda revelar la ubicación del Lugar Verde. Mary se cuela en el campamento y rescata a Furiosa, pero Dementus los rastrea. Comenzando una persecución extasiante que acaba con imágenes de muy bíblicas de criucifixión.

 

Asistimos a la transformación de Furiosa de una niña a la mujer empoderada en busca de venganza, solo tiene esa idea en la cabeza, solo se define única y exclusivamente por ello. Físicamente esto lo vemos duran un tramo de un Cuarto de hora a mitad de la película, Alyla Browne, en rol de la niña de 10 años que da título al filme, deja paso a Taylor-Joy 15 años después. Aunque luego, que tengamos que tragarnos que por un corte de pelo, una capucha y hacerse la mudita los demás le tomaran sin rechistar por un hombre resulta forzar mucho la credibilidad, y encima nadie la echa en falta cuando desaparece, cuando ha sido muy valorada como mujer (para el harem de Dewmentuis)cuando fue parte del pago de un trato (¿?).

 

Y por el camino la cinta resulta desordenada, errática, desorientada en su tono, aderezado por diálogos entre triviales y chuscos, con personajes arquetípicos, con un némesis de la heroína bastante caricaturesco en Dementus. Es una película que quiere ser lo mismo que la anterior, pero más y desbarra aparatosamente en tierra de nadie.

 

La película tiene su jugo en la escena de mitad de metraje con núcleo en un camión tráiler cisterna resplandecientemente plateado, con dos secciones, con la retaguardia protegido por un artilugio endemoniado de bolas que giran cual ventilador, manejado por un enano cabezón grotesco. Avanzado a toda velocidad por el desierto, protegido por autos tuneados. Cuando es atacado por motocicletas que lo rodean, con algunas tirando de parapentes llevados con motor, con uno adornado por unos fantasmales tentáculos negros que se estiran con el aire. Brutal esta batalla, con explosiones, muertos, luchas bajo el camión, ataques frontales, gente que se desliza bajo el armatoste, gente aplastada por las ruedas, pero siendo vibrante, la sensación de déjà vu es permanente, cual, si estuviéramos viendo una escena de la anterior, no hay originalidad alguna plagiándose a sí mismo pero peor, pues los CGI son notorios en su peor versión. Hay otras escenas de acción, pero no encandilan, esta el referido arranque, el primer intento de Dementus de tomar Ciudadela (una especie de Tierra Prometida que todos ansían por el agua y comida que atesora), muy poco lucido en una estrategia propia del hermano tonto de Forrest Gump, o la batalla en Gastown, espectacular, pero con el (valga la redundancia) pero de un exceso de CGI que resta vibra al tramo.

 

Hay un acercamiento a como se rige la Ciudadela, por Immortan Joe (Lachy Hulme, reemplaza a Hugh Keays-Byrne de Fury Road, murió en 2020), preside una secta enferma de asesinos suicidas que sienten devoción por los motores de autos, y que extiende su linaje real manteniendo un harén de esposas esclavas sexuales, aunque todo esto ya aparece en “Fury Road”. Hay una especie de intento de traer a Mad Max y su relación de “Fury Road” a esta, con la inclusión de Pretorian Jack (Tom Burke), pero este surge de la nada, y nos quieren colar un romance entre ellos más chirriante que el Titanic partiéndose en dos, no hay química entre ambos, nos la quieren dar empellones la relación y se hace bola. Así que cuando Pretorian desaparece la emoción es entre inexistente y nula.

 

Anya Taylor-Joy es una gran actriz que aquí se encuentra desorientada ante un papel tan plano, sin dimensión alguna, que apenas suelta dos frases durante el film, se tira largos tramos sin abrir la boca, pero como su rol es tan monocorde tampoco puede exprimir sus preciosos ojos, tampoco sabe sumarle carácter. Ah, y el tramo con Pretorian, como ya he mencionado, es un apósito mal colocado; Su antagonista es Dementus, una creación sobre el papel sustanciosa y apetitosa para un actor, pero Chris Hemsworth no sabe sacarle el partido necesario, lo deja en una caricatura pulp grotesca, con larga méllenla (Thor?), barba, musculatura vigoréxica (Thor) y una prótesis de nariz aparatosa para afear su rostro, no sabe proyectar algo interior, y eso que tiene el detalle del peluche de su hija fallecida como recuerdo que podría haber le otorgado aristas, pero esto no se exprime  y se queda en un divertido guiñol operístico salido de un peplum (parodiando a Thor, al que da vida el actor aussie en varios films?). moviéndose por el desierto ataviado con capa, en un carro tirado por tres motocicletas.

 

Entre las taras también está la música del tulipán Tom Holkenborg (conocido como Junkie XL), apoteósicamente engarzada a “Frury Road”, con ese salvaje añadido de que el músico en persona toca la guitarra colgado de la parte trasera de un tráiler con altavoces pantagruélicos. Pero aquí, siendo el mismo músico, resulta intrascendente.

 

Spoiler:

 

Una de las cosas que todos los amantes de “Fury Road” esperamos es ver como Furiosa pierde el brazo. Y me ha sido bastante cogido con pinzas (siendo generoso). Y es que Furiosa tiene el brazo roto tras un golpe en la persecución. Atrapada por Dementus, la cuelga del mismo brazo mientras hace un ‘akelarre’ con decenas de motos corriendo en círculos (para matar a Pretorian), levantando una enrome humareda de polvo desértico. Cuando las motos paran, vemos que el brazo cuelga solo, y nos recuerda indefectiblemente a “127 horas”, pues Furiosa para vivir ha sacrificado su extremidad, y con ella el tatuaje del mapa de cómo llegar a la tierra de su ‘tribu’. Forzando los niveles de realismo la vemos que ha robado una moto con el muñón debiera sangrando, y huye de allí a toda mecha como si siguiera teniendo los dos brazos, ello con los ‘dementu’s boys’ persiguiéndole en moto (¿?). debe ser que el aire post apocalíptico cura heridas ultrarrápido.

 

Mientras Furiosa huye a pie con el brazo cortado, vemos un guiño a Mad Max, cuando vemos a Max junto a su coche de espaldas observando a lo lejos desde un tajo.

 

Rush final: Furiosa, una vez en Ciudadela tras automutilarse el brazo, alerta a Inmortan Joe de la estrategia de Dementus para tomar la fortaleza. Con lo que lo contrarrestan, pero esta batalla se nos hurta de modo grosero al espectador. Solo vemos los restos que han quedado de la tribu de Dementus. Pero, oh, sorpresa! El único que ha escapado es precisamente Dementus. Furiosa, que se ha afeitado la cabeza, reemplaza su brazo con una prótesis mecánica, haciéndose con un vehículo para perseguir por el desierto a Dementus con ansias de vengarse, da con él, y no tiene muy claro que hacer con él. Dementus hace el mejor discurso del film sobre la venganza fútil. Furiosa acaba sometiendo a Dementus en la Ciudadela y usa su cuerpo vivo como fertilizante para hacer crecer un árbol de duraznos a partir de la semilla de su madre. Joe asciende a Furiosa a "Imperator" y le dan el mando de un nuevo War Rig. Ella se encuentra con las cinco esposas criadoras de Joe en la bóveda donde Joe una vez la mantuvo prisionera. La noche antes de otra carrera de suministros, las "Cinco Esposas" se esconden en el Rig de Furiosa, enlazanndo con “Fury Road”.

 

El director George Miller y el coguionista Nico Lathouris pasaron más de 15 años escribiendo el guion de Mad Max: Fury Road (2015), y desarrollaron historias de fondo para cada personaje, particularmente el coprotagonista Imperator Furiosa. Finalmente escribieron un guion centrado en Furiosa, que la actriz Charlize Theron usó como referencia para su actuación en Fury Road. Según Miller, Furiosa "probablemente" tiene lugar después de Mad Max Beyond Thunderdome (1985), pero la franquicia Mad Max "no tiene una cronología estricta". El primer tráiler de la película, lanzado el 30 de noviembre de 2023, declaró que Furiosa tiene lugar "45 años después del colapso".

 

Furiosa: A Mad Max Saga se filmó en las ciudades de Hay y Silverton en Nueva Gales del Sur, la última de las cuales a menudo se considera una ciudad fantasma, aunque tiene una pequeña población de 48 personas; Silverton alberga un museo de Mad Max 2. El rodaje se llevó a cabo en Australia de mayo a octubre de 2022; la fotografía principal comenzó el 1 de junio de 2022. Miller rodó la película en varios lugares de Nueva Gales del Sur: Broken Hill / Silverton, Hay (la secuencia de acción de Stowaway), Kurnell (la Bullet Farm y el enfrentamiento final entre Furiosa y Dementus), Terrey Hills (el Green Place), Melrose Park (Gastown) y el lote de Disney en Sydney (la Ciudadela). [73] La secuencia de acción donde los asaltantes emboscan al War Rig tardó 78 días en rodarse, donde cerca de 200 especialistas trabajaron en ella todos los días; la secuencia se conoció durante la producción como "Stairway to Nowhere".

 

El supervisor de efectos visuales de Fury Road, Andrew Jackson, regresó para Furiosa. Su estudio casero, DNEG, trabajó con Framestore, Metaphysic.ai, Rising Sun Pictures y slatevfx. Había recibido una nominación al premio de la Academia por Fury Road y posteriormente ganó el Oscar por Tenet (2020). Jackson dijo que Furiosa "se apoya mucho más [que Fury Road] en los efectos visuales" y que Miller "adoptó por completo la idea de que la CG es el camino a seguir para construir mundos y hacer lo que sea necesario en la posproducción".

 

Además del trabajo tradicional de CGI, como aumentar los fondos y unir el trabajo de varios especialistas que filmaron sus escenas por separado por razones de seguridad, Jackson usó efectos visuales para realzar ciertas escenas de acción, como la secuencia de acción de Stowaway, donde los efectos visuales animaron la desaparición de The Octoboss y la secuencia de persecución final, donde se usó una versión CGI del auto de Furiosa (por lo demás práctico) para animar "cosas demasiado peligrosas para hacer con un auto real, como motos que chocan de lado". Los efectos visuales ayudaron a "generar una sensación de movimiento" al hacer que los elementos del fondo se movieran más rápido y animar equipos voladores como el paracaídas negro ondulante de The Octoboss.

 

El rodaje se llevó a cabo en Australia de junio a octubre de 2022. Según la Australian Broadcasting Corporation (ABC), Furiosa fue la película más cara de la historia de Australia, con un presupuesto de 333,2 millones de dólares australianos. Más de 3000 personas trabajaron en la película, incluidos algunos ex convictos contratados como artistas secundarios.

 

No es que sea un mal film de acción y aventuras, es que para mi el listón de medida era “Fury Road” y de ahí mi chasco, aun así, una peli entretenida a ratos, con escenas de acción muy superiores a la media. Gloria Ucrania!!!