domingo, 14 de agosto de 2016




ALGUIEN VOLÓ SOBRE EL NIDO DEL CUCO 

Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Obra Maestra del checo Milos Forman, una de las cintas que han hecho grande a la década de los 70, obra con multitud de sublecturas, el film crea paralelismos evidentes entre el manicomio y una dictadura, hay quien ha creído ver a los estados Unidos transfigurados en esta institución, y otros han visto el país de procedencia del realizador. El magnífico guión de Lawrence Hauben (“A quemarropa”) y Bo Goldman (“City hall”) basándose en novela la novela homónima de 1962 mismo nombre del escritor de Oregón Ken Kesey (1935-2001), que no quedó satisfecho con su adaptación al cine, no así la crítica, la avalan sus Top Five en los Oscar (Mejor película, actor  principal, actriz principal, director y guión, además de la fotografía y la edición), desde 1934 con “Sucedió una noche” no ocurría, y no se repitió hasta 1991 con “El silencio de la corderos”. Ganó el Oscar a la Película sobre cuatro potentísimos candidatos: “Nashville” de Robert Altman,  “Tiburón” de Steven Spielberg, “Barry Lyndon” de Stanley Kubrick  y “Tarde de perros” de Sidney Lumet; En directores Forman competía con varios mitos de la realización: Federico Fellini por “Amarcord, Altman, Kubrick y Lumet. El título proviene de una canción que uno de los enfermeros cantaba en la novela, argot, "cuco" en inglés significa loco, cuco es el único pájaro no tiene nido, pone huevos en nidos de otras aves para estas los incuben, con lo que el protagonista es un cuco sin nido que entra en el hogar (manicomio) de otros pájaros (los locos) y les cambia la vida para siempre. Portentosa la actuación de Jack Nicholson que baña de humanidad todo el metraje.

Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975En 1963 Oregon, Randle Patrick "Mac" McMurphy (Jack Nicholson), un  preso reincidente es transferido a una institución para su evaluación. A pesar de que no muestra signos evidentes de enfermedad mental , se espera evitar el trabajo duro y servir el resto de su condena en un entorno hospitalario más relajado. El ala de enfermos mentales está dirigida por la rígida enfermera Mildred Ratched (Louise Fletcher.  McMurphy se establece como líder de sus compañeros de los pacientes. Otros pacientes de la sala incluyen Billy Bibbit (Brad Dourif), un hombre nervioso, propenso a la ansiedad con notable tartamudeoCharlie Cheswick (Sydney Lassick), hombre propenso a ataques infantiles, Martini (Danny DeVito), con delirios, Dale Harding (William Redfield), un nervioso paranoide; Max Taber (Christopher Lloyd), un violento latente, Jim Sefelt (William Duell), un epiléptico , y "Jefe" Bromden (Will Sampson), un sordomudo de imponente estatura.

Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Milos Forman elabora un film sólido, con un desarrollo fluido, en una miscelánea fascinante de humor y drama, desplegando una sensible tridimensionalidad en los personajes, inundando de emotividad la historia, estructurando un campo de acción en que chocan dos modos de ver la vida, la individualidad inconformista frente a la dogmática autoridad que nos desea resignados, ello evolocionando hacia un final de los más conmovedores que ha parido el Séptimo Arte, Antológico. La cinta se convierte en un absorbente alegato antifascista, un complejo enfrentamiento entre lo racional y lo racional, entre el orden autoritario y el caos, en una elogio a la locura, una loa pro rebeldía, un fascinante canto a la libertad, una mordaz crítica al despotismo, una celebración de la imaginación como arma de liberación, un incisivo ataque contra el poder ejercido de modo autoritario sin pensar en las personas, una loa de la amistad (hermosa la que sucede entre el “Jefe” indio y McMurhy), una punzante fábula anti-sistema, una ácida crítica al conformismo (representado en los pacientes), contra la represión sexual. Todo lo malo encarnado en la gélida enfermera Ratched, y lo bueno en el “enfermo” y espíritu libre McMurphy, un contestarios vitalista que transmite esta energía alegre a su compañeros de ala, estableciéndose entre los dos un duelo sibilino por el poder de este micromundo, la enfermera anhela mantener el status quo en que los “locos” son un manso rebaño de ovejas sin aparentes emociones, acentuado esto por la medicación que anestesia sus espíritus, una Guerra desigual, ella mostrada no como una caricatura de villanía, si no que la vemos en su frialdad convencida de que sus formas de disciplina son las buenas, en que él parece ir ganando batallitas, ganándose a los “enfermos” con su aire fresco que barre lo mortecino, mostrándoles un mundo nuevo de sensaciones (partidas de cartas, salidas de fiesta en barco, alcohol, y hasta el sexo),  de cómo divertirse y sacarle partido a la vida, ello desembocando en el clímax final en una lucha definitiva, donde queda patente la fuerza de uno y otra. En medio están los “enfermos mentales”, mostrados con aristas, con virtudes, con alma, lejos de clichés acartonados, con frustraciones, personajes con los de que algún modo podemos identificarnos, poseen un arco de desarrollo fascinante, de ovejitas dóciles van tornando a personas que en realidad solo quieren ser comprendidos y no avasallados, desean se les escuche, desean jugar, ver deporte (aunque no lo entiendan), tener sexo, desean romper con la monotonía que los consume.

Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Una narración con profundos toques humanistas, que tiene el subtexto de que los pueblos deben luchar contra el estado cuando este los veja, los trata sin alma, los despoja de derechos, no se sabe muy bien si el hospital mental representa a USA en esos años convulsos de manifestaciones contra la Guerra del Vietnam, o se refiere el realizador a la Checoslovaquia natal, nación reprimida por la dictadura comunista, de hecho el se exilio del país tras la Primavera de Praga (1968), cuando los soviéticos invadieron la capital checa cuando estos buscaban apertura libertaria, o quizás Milos pueda pensar en el nazismo, ejemplo máximo de la tiranía y la intolerancia, y es que él lo sufrió en sus carnes, sus padres murieron en campos de concentración germanos, su padre en Buchenwald y su madree en Auschwitz. Aunque también directamente es una acerada denuncia contra los tratamientos a los enfermos mentales,  contra los electroshock, contra las lobotomías, contra unos métodos que disolvían la individualidad, la trituraban. Este hospital y su ala para enfermos mentales, con su rígida jerarquía de poder manejado de modo abusivo también es exponencial a otros lugares como cárceles (en esto me recuerda bastante a la estupenda “La leyenda del indomable” con Paul Newman), empresas, cuarteles militares, internados, etc. 

Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975El elenco actoral resplandece por la autenticidad que transpiran, no solo los dos antagonistas, si no el resto secundarios, los “lunáticos”, todos matizados, o el guardia nocturno, todos aportando. Jack Nicholson como McMurphy marcó un antes y después con su actuación, emite con su rostro y mirada todo una sublime gama de emociones, una carisma arrollador, una empatía con el espectador apabullante, un poderío  y un vigor excelso, un alma indomable, una sonrisa de pícaro memorable, Epicúreos sus duelos con la enfermera Ratched, curiosamente el no fue el primer barajado para el papel, lo intentaron con Gene Hackman y a Marlon Brando, al rechazarlo estos lo hizo Jack Nicholson, con status de estrella ya con films como “Easy Ryder” (1969) o “Chinatown” (1974). Louise Fletcher en una interpretación como la enfermera Ratched fabulosa, una especie de alcaide que maneja con rigidez marcial su ala de enfermos mentales, de gesto impasible, sin experimentar (aparentemente) emoción alguna, con una flema impresionante, imperturbable, de oratoria educada pero sin aportar corazón, de gesto contenido, extraordinario el modo de impregnar de despotismo la pantalla, genial que le pongan a una enfermera  más pequeña y joven que siempre la acompaña sin decir palabra, a modo de guardaespaldas, la actriz desconocida entonces (después tampoco ha hecho algo relevante) llegó al rol tras rechazarlo Angela Landsbury y Joan Crawford, Louise Fletcher, agradeció su Oscar en lenguaje de signos, en honor a sus familiares sordos, dejando el auditorio en silencio durante. Will Sampson como “El jefe” indio, actor novel escogido por su físico similar al descrito en el libro , excelente en su encarnación del tipo “sordomudo” que entabla una entrañable relación con el protagonista, teniendo su premio cuando es el “héroe” en el Colosal clímax final. Danny DeVito da vida al trastornado Martini, lo hace con gran realismo, sonriendo constantemente. Sydney Lassick como el enfermo Cheswick derrocha rabia y fuerte personalidad en sus arranques de furia. Brad Dourif como el enfermo Billy Bibbit, en su debut en cine demuestra lo gran actor que es, desarrolla toda una galería de sentimientos, un reprimido sexual tremendo en su duelo final con la enfermera Ratched. Scatman Crothers como el vigilante nocturno Turkle deja constancia de su vis cómica. También aparece un actor que después se haría famoso en la saga “Regreso al futuro”, me refiero a Christopher Lloyd.

Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975La puesta en escen aes sobresaliente, una gloriosa recreación del hospital y su ala de “locos”, con un gran diseño de producción de Paul Sylbert (“Kramer contra Kramer”), rodando íntegramente en el estado de Oregón, en el hospital de Salem (escenario del libro) y alrededores, en Depoy Bay el tramo de la salida en barco, esto bajo la fotografía de Haskell Wexler (“El caso de Thomas Crown”), bañando de blanco los frogramas, sabiendo moverse entre los tomas amplias para dar cabida a la coralidad del reparto siempre activo, unos sentidos primeros planos que sonsacan lo mjeor de la expresividad de los actores. El score corre a cargo de Jack Nitzche (“Oficial y caballero”), muy bien amoldada a la acción, enervadora en el clímax con “El Jefe” indio, emitiendo Épica Homérica.


Spoiler:


Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975Momentos recordables: Al poco de llegar McMurphy al psiquiátrico, este les espeta a los pacientes con respecto a la sumisión ante la enfermera Ratched “Parecen ustedes mujercitas en torno a las faldas de la abuelita”: Lo bien que maneja los tiempos el realizador al acentuar la tensión reinante entre McMurphy e la enfermera jefe, manteniendo los planos fijos en sus rostros en silencio haciendo elevar la tensión latente entre los dos; En los servicios, los internos reunidos, McMurphy les dice que va a salir fuera a ver un partido de baseball a un bar, los demás le dicen que no puede, él dice que cogerá la pesada columna de grifos y la tirará por la ventana y por allí saldrá, entonces haciendo tremendo esfuerzo intenta arrancar la columna, los demás le observan en silencio, es en vano, Mc lo deja y les espeta a los demás que por lo menos lo ha intentado, esto enlazará con el final; El canto a la imaginación como vía para ser libre, cuando McMurphy pide ver las series mundiales de Baseball por TV a la enfermera Ratched, hacen una votación entre los pacientes de la sala, McMurphy consigue la mayoría de votos, pero la enfermera no hace caso, ella había clausurado la reunión antes del último voto ganador. McMurphy no se viene abajo, se acerca al televisor y empieza a narrar un partido que sólo se juega en su imaginación, los locos le rodean mientras comenta jugadas del partido delante de televisor apagado, todos celebran cada Home Run como si lo estuviesen viviendo en el campo, Ratched los mira con desprecio (en un primer plano) se da cuenta que podrá quitarles la televisión, nunca podrá anular su imaginación; La placentera escapada de todo el ala de “locos” en bus y después en barco, auspiciada por McMurphy; McMurphy está junto al gigante “Jefe” indio, supuestamente sordomudo, le ofrece un chicle, el indio lo coge y ese instante se produce un momento mágico, dice “Gracias”, McMurphy lo mira incrédulo, dudoso, confuso, y vuelve a ofrecerle otra goma de mascar, y entonces el “Jefe” responde “'' Uhm... Con sabor a frutas!", McMurphy vuelve a observarlo y rompe a reír a carcajada suelta, el “Jefe llevaba años engañando a todo el mundo; Cuando McMurphy vuelve al ala tras sufrir una sesión de electroshock, avanza por la sala cual zombi, los compañeros de ala lo miran impactados, entonces Mc guiña un ojo al “Jefe” y todos sabremos que es una broma, un toque de humor negro,. Que desgraciadamente tienen su enlace con el final; La fiesta-bacanal de Navidad en el ala de “locos” del hospital, por supuesto sufragada por Mc, alcohol, prostitutas, música, borracheras, sexo, un desparrame con el zenit de la cámara paseándose por el lugar por la mañana, viéndose como de devastada ha quedado la “Zona Zero”; El desgarrador enfrentamiento entre Ratched y un Billy Bibbitt que han pillado fornicando con una mujer, la enfermera lo apoca, lo avergüenza, lo veja , lo humilla, terminando el enfermo por cortarse las venas, entonces McMurphy explota e intenta estrangular a la enfermera jefe, impidiéndolo los guardias; Tras el intento de asesinato a la Ratched, hay una elipsis, es de noche, los pacientes duermen y vemos que traen dos guardias a Mc, lo tumban en la cama, cayendo Mc como fardo sin vida, el “Jefe” lo ve y se levanta le habla sobre escaparse, pero Mc permanece en plan vegetal, el “Jefe” le mira la sien y ve que le han hecho una lobotomía, dos grandes cicatrices lo confirman, entonces lo abraza sollozando, el “Jefe” le dice que no puede escapar sin él, que no podría dejar en ese estado, le dice “Tú vendrás conmigo”, lo deja caer en el colchón y comienza la escalofriante música, el “Jefe” le pone la almohada sobre la cara, y la aprieta, lo asfixia durante unos segundos interminables, hasta que deja de respirar, le retira la almohada y el rostro de Mc está sin vida. El JEFE entonces va a los servicios (la música se eleva) y arranca con gran esfuerzo la pesadísima columna de los grifos de cuajo, saltando el agua por la habitación en señal cuasi-orgásmica, homenaje a cuando Mc intentó en vano arrancarla, el JEFE la lleva por el dormitorio, la alza y la tira contra la enrejada ventana, destrozándola (la música hace redoble elevándose aún más), el enfermo encarnado por Christopher Lloyd se despierta y ve saltar por la ventana rota al JEFE, y comienza a sonreír alocadamente, los demás internos se despiertan y miran la ventana destrozada, y lo último que veremos es al JEFE marchar corriendo al amanecer hacia el horizonte, llevando consigo el ESPÍRITU INDOMABLE de McMurphy, APOTEÓSICO CANTO A LA LIBERTAD EN TODAS SUS VERTIENTES.

Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975El rodaje se llevó a cabo en hospital psiquiátrico, institución Estatal de Oregón, el escenario del libro de Kesey, el reparto estuvo diez días encerrado allí, conviviendo con enfermos reales y asistiendo a terapias de grupo para entender mejor la vida de esas personas. Los actores dormían en celdas individuales, ensayaban constantemente diálogos del guión, Forman los filmaba sin parar, ello propició sobrecogedor aire de realismo respira la cinta.

Existen algunas diferencias entre la versión cinematográfica y la novela, la más importante es el narrador, la novela es narrada por el indio Brondems, captando todo lo que ocurre a su alrededor sin emitir sonido mientras en la película es el atrevido McMurphy.
Resultado de imagen de One Flew Over the Cuckoo's Nest 1975 
OBRA MAESTRA de visión obligatoria para todo cinéfilo que se precie, atronadora oda a la Libertad. Fuerza y honor!!!


No hay comentarios:

Publicar un comentario