jueves, 29 de octubre de 2015



LUCES DE CIUDAD.

Resultado de imagen de city lights 1930Resultado de imagen de city lights 1930Uno de los films más famosos del genial tragicómico Charles Chaplin, su quinto largometraje mezcla con enternecedor equilibrio el humor con el drama, de hecho para no romper este susodicho mesura a favor del humor, Chaplin renunció a 7 minutos iníciales de comedia desatada, para que después el público pudiera conmoverse con más facilidad. Lanzada cuando ya el sonoro irrumpía en los cines, pero Chaplin se negó a hacerla hablada, presentando el diálogo en intertítulos, entendía que su cine tenía más alma siendo mudo, pero el cine hablado ya nadie lo detendría, aunque Chaplin comentó a un periodista que daba al cine sonoro dos o tres años, creo se equivocó, aún así hay dos momentos sonoros en los que se puede entender es una sátira del cine hablado, dos mordaces guiños, uno es en el arranque en que unos políticos hacen unos discursos en la inauguración de una estatua, esto es oído a base de gruñidos inentendibles, chanza de lo que suelen decir estos oradores, el otro momento sonoro es cuando se traga Chaplin un silbato, esto como parodia de los primitivo que estaba aún el sonido. La idea de la historia le surgió a Chaplin de su anterior film, “El Circo”, donde un payaso ciego oculta su tara a su hija, de aquí la florista ciega de “Luces de ciudad”, siendo la escena final la primera escena que creó, para la trama secundaria del borracho rico Chaplin recuperó a un personaje de un corto suyo de 1921, “The idle class”. Fue un rodaje accidentado y con múltiples problemas, sobre todo debido al perfeccionismo de Chaplin, lo que le llevó a un rodaje de dos años, tiempo en el que murió su madre, hecho que le afectó.  El actor que iba a dar vida al millonario borracho era Henry Clive, pero en la escena en que intenta suicidarse, el actor debe saltar a un tanque de agua y se negó, Chaplin lo despidió ipso facto, lo reemplazó por Harry Myers,  Chaplin lo había conocido mientras trabajaban ambos en Keystone Studios. Virginia Cherrill para Chaplin era una quejicosa, siendo el colmo que durante el rodaje de una escena pidió al realizador si podía terminar temprano para ir a la peluquería, Chaplin la despidió, la sustituyó por Georgia Hale, co-protagonista con Chaplin en “La quimera del oro”, pero tras varias pruebas el director no la veía en el rol, barajó a la joven actriz de 16 años Violeta Krauth, al final volvió a fichar a Virginia Cherrill, pero ella crecida exigió aumento de sueldo a 75 $ por semana, siendo complacida. Para la escena del combate de boxeo Chaplin contrató al actor Hank Mann como el oponente, aparecen en la escena 100 extras, y Chaplin tardó cuatro días para los ensayos y seis en rodarla, Chaplin inicialmente inquieto sobre la asistencia para esta escena invitó a sus amigos a ser extras, el rodaje provocó tan buen clima humorístico que más personas llegaron a diario para ser extras. El resultado lo resumió uno de los invitados de Chaplin al estreno, el físico Albert Einstein, al salir dijo <Alguien que estudie todas mis teorías con el paso del tiempo las podrá olvidar, alguien que vea esta película con el paso del tiempo no olvidará lo que hace sentir>.
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En una ciudad cualquiera un vagabundo (Charles Chaplin) malvive como puede, un día conoce a una chica ciega (Virginia Cherrill) que vende flores en la calle, le compra una flor y es confundido por ella con un adinerado tipo, el vagabundo se enamora de ella. Entre tanto el vagabundo conoce a un borracho millonario (Harry Myers) con ansias suicidas por haberlo dejado su mujer, lo peor es que cuando está sobrio no reconoce al vagabundo.

Maravillosa miscelánea entre el humor y el patetismo, una historia de amor sacrificado, metiendo en un fluido coctel las sonrisas y la emoción que roza las lágrimas, con claros tintes platónicos. Convierte su historia en una poética sátira de nuestro clasista mundo, arremetiendo con mordacidad contra los políticos y sus discursos vacíos, contra la impostada felicidad de los ricos, contra el imperante clasismo, que incluso se da entre los más bajos, ejemplo como los chicos vendedores de periódicos se meten con el vagabundo, o el criado del millonario que hace lo mismo. Esto desarrollado con un guión sencillo, lineal, moviéndose a base gags que muestran con viveza la personalidad de los personajes.

Resultado de imagen de city lights 1930Chaplin despliega un tropel de gas slapstick marca de la casa, haciendo que de las situaciones dramáticas surja el humor, hasta de un intento de suicidio sabe explotar su lado risueño, haciendo protagonista a su clásico vagabundo protagonista, siempre ilusionado, altruista, bueno, vitalista, defensor de las causas perdidas, contra el alcoholismo, contra las falsas amistades, incluso contra el pujante cine sonoro, pone en alza el amor puro, el que no espera nada del otro, solo su felicidad, el amor desinteresado, dulce, enternecedor.

La puesta en escena rezuma la clásica corrección de Chaplin, se rueda en exteriores de San francisco y los Chaplin Studios, aunque la idea inicial era que la ciudad fuese París, al final esto está indefinido, el director artístico Robert Sherwood dijo <Es una ciudad extraña, con semejanzas confusas con Londres, Los Ángeles, Nápoles, París, Tánger y Council Bluffs. No es una ciudad en la tierra y es todas las ciudades>, aunque todo los escenarios no son el punto fuerte del film, resultando en algún caso muy teatral, como la casa del millonario, aunque reseñable es el momento combate de boxeo, lleno de vida, se añade la correcta fotografía de Roland Totheroh (“La quimera del oro”, “Tiempos Modernos” o “El Gran Dictador”) y Gordon Pollock (“Queen Kelly”), estática y con el foco puesto en resaltar con planos abiertos la comicidad y dramatismo del relato, sobresaliendo los estremecedores planos finales. La romántica música tiene una gran importancia en crear la atmósfera emocional de la narración, compuesta por vez primera por Chaplin y arreglado por Arthur Johnston, acunando con ternura a los personajes, son el bello sustituto de los diálogos, el tema principal es "La violetera", leitmotiv para florista ciega, que Chaplin quiso pasar como original suyo, pero es un plagio del tema homónimo de los maestros José Padilla, este le ganó una demanda (en parís, donde residía) por no acreditarle.

Resultado de imagen de city lights 1930La cinta hay que verla como ya he dicho como una fábula moral, hay que darle muchas licencias dramáticas, me resulta poco creíble que el rico se emborrache y cuando está sobrio no se acuerde de nada lo hecho con Charlot estando ebrio, vemos que Charlot ha encontrado un trabajo, del cual es despedido por llegar tarde, crítica al capitalismo despiadado, pero tampoco vemos a Charlot buscar más trabajos, se pega al millonario a ver si le puede sacar algo. También se le puede achacar que se siente un tanto forzado el argumento, cosido a retazos de set pieces, se nota como Chaplin proviene del cine de humor de cortos, es por ello que se atiene a juntar unos cuantos buenísimos gags de modo algo coherente, que ya la magia de la buena construcción de personajes hará el resto, es por ello que orgánicamente se siente algo deslavazada, con tres historias que se rejuntan, la de la relación de Charlot con el rico borrachín, y el combate de boxeo, la de Charlot con la chica ciega, en la primera reside la mezcla entre el humor y el drama, en la segunda es el humor puro de slapstick, sin subterfugios, apoyado en una fisicidad abrumadora, y la tercera es la hermosa historia de amor.

Resultado de imagen de city lights 1930Curioso es ver como aún no estaba en vigor el Codigo Hayes de censura en el cine, y es que en realidad se podría llegar a decir que a este Charlot tenía claras tendencias gays, que deja relucir en varios momentos, aparece acostado con el millonario, si este es rico debe tener más de un dormitorio, entonces porque están acostado los dos juntos (con el Código Hayes hasta los matrimonios debían aparecer en camas separadas en pantalla), aquí hay tomate, de hecho no será que el millonario se arrepiente de su juerguecita homosexual y por ello prefiere olvidarla y cuando bebe sale su verdadera personalidad gay? Los vemos a los dos en fiestas con mujeres, pero no se ven a ellos coquetear con ellas, de hecho, no será que la esposa del muchimillonario lo ha dejado por hallar este lado homosexual en su marido? Este lado gay de Charlot puede quedar reforzado por el juego de miraditas amaneradas que tiene con el boxeador, como que tampoco intenta en momento alguno besar a la ciega, igual habría una sublectura en que Charlot  (Perdóname Dios del Cine) es en realidad un chapero callejero.

Charles Chaplin como siempre borda con enorme ternura y patetismo a su clásico vagabundo pícaro y de gran corazón, con una mirada profunda, y con un lenguaje gestual y físico apabullante. Virginia Cherrill creó un Icono del Cine con su chica ciega, otorgándole naturalidad, humanidad, yu desarmándote en la escena apoteósica final. Harry Myers impregna de una singular dualidad bipolar a su muchimillonario, con mucho humor y malicia con su sobriedad, poseyendo una buena química con Chaplin, bien explotada en el metraje.

Resultado de imagen de city lights 1930Resultado de imagen de city lights 1930Resultado de imagen de city lights 1930Momentos para el recuerdo: La apertura del film donde queda patente la figura vagabunda y patética de Charlot, en una concurrida plaza unos políticos se disponen a descubrir una estatua, no sin antes realizar un discurso oído a base de graznidos bordeados por trompetas (clara burla a los políticos y al cine sonoro que daba sus primeros coletazos), quitan la tela que cubre la estatua y sobre el regazo de la misma reposa un durmiente Charlot, exaltado trata de levantarse pero sus pantalones quedan enganchados en la espada de la figura (manejando hasta 380 extras); El primer encuentro entre el ricachón y Charlot, en la orilla de un rio, el millonario con una gran piedra amarrada se dispone a suicidarse, Charlot lo ve e intenta impedirlo con tan mala fortuna que termina él cayendo al rio con la piedra de lastre, teniendo que ser el ricachón el que los salve a él; El primer encuentro entre Charlot y la chica ciega, él la ve y queda prendado de ella, es una vendedora de flores callejera, le compra con lo que tiene una flor y por un malentendido es tomado por adinerado por ella, él le sigue el juego, y hace como que se va, pero se sienta a admirarla, ella de un grifo echa agua en un cubo, él la mira embobado, entonces ella enjuaga el cubo y tira el agua... hacia el rostro de Charlot; Los delirantes encuentros entre el borracho rico y Charlot, sus fiestas, en una Charlot se traga un silbato sin querer y provoca el caos en un sarao, parando taxis y atrayendo una jauría de perros; El espectacular tramo del combate de boxeo, todo un cortometraje en sí, todo una lección de cómo crear una conjunción de gags que son un tsunami de humor, siendo el zenit el combate sobre el ring, delirante coreografía, imposible no soltar carcajadas ante tant5a inventiva; Y por supuesto su escalofriante final, simplemente uno de los mejores jamás realizados en la Historia del Séptimo Arte, donde la poesía y la emoción se desbordan, Charlot sale de prisión en que ha estado por conseguirle a la chica ciega 1000 $ para operarse de la vista, vaga con ropa raída por las calles, vemos que la chica ha recuperado la visión y ha abierto una floristería en un local, sus pira por encontrar a su benefactor que cree es un millonario, vemos que Cahrlot se agacha en la calle a recoger una flor del suelo, unos niños se ríen de sus aspecto de vagabundo, Charlot se da la vuelta y está ante el escaparate de la floristería, ella le mira con compasión, él sonríe plácidamente y comienza a alejarse del lugar, entonces ella sale fuera para darle una flor y una moneda, sus manos se tocan, y ella ve la luz, por el tacto sabe este vagabundo es su mecenas, y se produce un sencillo  pero a la vez uno de los más tiernos y trémulos diálogos jamás oídos en cine: <Usted?> ella dice, Charlot asiente con tímidamente con una sonrisa  y le pregunta, <Puedes ver ahora>, <Si>, responde ella entre lágrimas <Puedo ver>, (-You can see now? -Yes, I can see now), sosteniendo con dulzura la mano de un Charlot que sonríe con satisfacción, entonces hay un fundido bello a negro, dejando abierto lo que ocurre a la mente del espectador, delicioso.

Resultado de imagen de city lights 1930Del impacto del film habla la gente que la tienen en su Olimpo, Orson Welles dijo que era su película favorita, en 1963 Stanley Kubrick la situó en el quinto lugar entre sus diez mejores films, además de ser la cinta preferida entre las realizadas por Charles Chaplin.


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